Palma de Mallorca aplica a destajo la ordenanza antibotellón y trileros

Cuando se han superado los dos meses desde que la ordenanza empezó a aplicarse en la Playa de Palma el pasado 20 de junio, las asociaciones han defendido la validez de esta norma "tanto en el contenido como en su filosofía", ha informado la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) en un comunicado. Ver también Palma de Mallorca atajará el botellón, trile y venta ambulante con una nueva ordenanza

Así, los hoteleros consideran que la ordenanza establece unas normas de convivencia "propias de países económicamente avanzados" y es relevante dada la importancia de la seguridad y la imagen como factor diferencial en los destinos turísticos responsables.

"El objetivo debe ser que los turistas que eligen Palma encuentren una ciudad amable, limpia y acorde al estándar educacional y de sostenibilidad europeos", señalan la nota.

Las asociaciones piensan que dar a conocer a los residentes y a los turistas que determinadas actitudes son reprobadas en Palma "no hace más que diferenciar y añadir valor al destino, ya que en la mayor parte de países europeos tienen hechos similares".

Consideran que la nueva normativa ayuda a las campañas de sensibilización que durante años se venían instrumentando por parte de organizaciones y empresas privadas de forma no lucrativa para facilitar la convivencia en espacios masivos.

"La ordenanza, además, preserva las libertades individuales, ya que la libertad de cada persona acaba donde empieza la de la otra", concluye la nota de las patronales.

La ordenanza cívica limita actividades como el botellón o poner música a un elevado volumen en la calle y prohíbe la actividad de los trileros y los masajistas irregulares, así como la venta ambulante.

Palma de Mallorca aplica a destajo la ordenanza antibotellón y trileros

Multas

La Policía Local ha abierto 139 actas de infracción a trileros desde que entró en vigor la ordenanza para la Convivencia Cívica en la Playa de Palma el 20 de junio, 202 por consumo de alcohol en la calle y 319 a masajistas que actúan de forma irregular.

El teniente de alcalde de Turismo y Coordinación Municipal de Palma, Álvaro Gijón, dio a conocer estos datos el pasado 22 de agosto y ha asegurado que las cifras "demuestran que la ordenanza está funcionando".

Si del 20 de junio al 20 de julio se habían incautado 9.736 artículos de venta ambulante, entre el 21 de julio y el 20 de agosto han sido 8.063.

Según Gijón, el dinero incautado a masajistas y trileros fueron 2.500 euros el primer mes y unos 2.300 el segundo. "Se sigue actuando con el objetivo de erradicar ambas prácticas", ha subrayado.

Gijón ha destacado el "aumento considerable" de las multas cobradas a los extranjeros en el mismo momento de la sanción, que han pasado de 3.980 euros en el primer mes a 8.035 euros en el segundo.

El responsable municipal ha defendido que el afán de este cobro anticipado es disuasorio. Si los turistas se acogen a esta modalidad y pagan la multa en el momento, la sanción se reduce un 50 %.

La policía ha incautado más de 500 cubos en Playa de Palma, con lo que "de ser práctica habitual, el botellón en el murete ha quedado reducido a mínima expresión", ha dicho Gijón.

En cuanto a la prostitución, si antes de la entrada en vigor de la ordenanza había unas 65 personas ejerciéndola en la Playa de Palma, disminuyeron a 20 tras el primer mes. Gijón ha destacado la importancia de esta reducción porque "lo que hacían era intentar robar directamente a los turistas en estado de embriaguez".

Gijón considera positivos los resultados de la ordenanza. "No es la panacea, porque no va a acabar al cien por cien con todas las infracciones y los problemas de convivencia en la ciudad, pero es útil para reducirlos y minimizarlos como se está demostrando", ha asegurado.