La afluencia de turistas extranjeros a España ha descendido en agosto de 2003 un 6,8 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, pero "hay que tener en cuenta que éste había sido muy especial, con un crecimiento superior al 14 por ciento", indicó hoy el secretario general de Turismo, Germán Porras.
La afluencia de turistas extranjeros a España ha descendido en agosto de 2003 un 6,8 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, pero "hay que tener en cuenta que éste había sido muy especial, con un crecimiento superior al 14 por ciento", indicó hoy el secretario general de Turismo, Germán Porras.
Porras calificó el mes de agosto como "atípico", aunque recordó que ya, con anterioridad, se había producido un fenómeno similar, la disminución del 7,1 por ciento en 2000, año, además, "sin ningún acontecimiento especial" que pudiera afectar al sector turístico y provocar la caída de las llegadas extranjeras. Durante el mes de agosto pasado, el número de turistas (que pernoctan al menos una noche) extranjeros fue de 7,3 millones, mientras que el de visitantes fue de 11,8 millones, un 2,9 por ciento menos que en 2002. En el conjunto de los ocho primeros meses del año, las cifras son positivas, con un crecimiento interanual del 0,5 por ciento en cuanto a turistas (37,1 millones) y del 3,1 por ciento en el caso de visitantes (57,9 millones). Porras destacó la caída de las entradas por carretera, que fue en agosto del 29,6 por ciento y que no pudo ser compensada por las llegadas de turistas por aeropuerto que registraron un crecimiento del 8,2 por ciento. Entre los meses de enero y agosto, las llegadas por carretera se han reducido un 12,6 por ciento frente al 6,6 por ciento que se han incrementado las aéreas, crecimiento que, para Porras, significa "una progresiva vuelta a las pautas normales de nuestros movimientos turísticos". En la quiebra producida en las entradas por carretera, especialmente en las de autobuses, pudo incidir, según Porras, "aunque pueda parecer banal", la situación climatológica en Europa que hizo que muchos potenciales viajeros se quedaran en casa.
En cuanto a entradas por vía aérea, Porras destacó un fenómeno que "va tomando más importancia", en referencia al número de pasajeros que llegan a España con compañías de bajo coste y cuyo crecimiento en agosto fue del 50,8 por ciento. Este tipo de pasajeros, que, según Porras, "suelen gastarse en destino lo que no les cuesta el pasaje", será analizado próximamente para obtener datos sobre su comportamiento relativo a la elección de alojamientos, restaurantes, transportes o actividades. La caída de las entrada por carretera afectó en especial las comunidades autónomas fronterizas de Cataluña y el País Vasco, que registraron en agosto caídas del 16,3 y el 18,4 por ciento respectivamente, aunque en el conjunto del año, las dos muestran comportamientos positivos con un 0,2 por ciento negativo y un 2,6 por ciento positivo para cada una de ellas. Además, Cataluña fue en agosto, a pesar de este retroceso, el primer destino del turismo internacional en España, con el 25,1 por ciento del total y 1,8 millones de turistas, seguida de Baleares, con el 24,4 por ciento, Andalucía, con el 13 por ciento, Canarias, Valencia y Madrid. En Baleares, el número de extranjeros creció en agosto un 2,8 por ciento, gracias al buen comportamiento de sus dos principales mercados emisores, el Reino Unido y Alemania, con incrementos del 0,3 y el 9,7 por ciento respectivamente. Andalucía, Canarias y Valencia registraron descensos del 2,3, del 2,9 y del 12,3 por ciento respectivamente, mientras que Madrid incrementó en un 1 por ciento el número de turistas, lo que se debe, en parte, al crecimiento de las llegadas de viajeros estadounidenses, cuyo número creció en agosto en España un 43,8 por ciento. Respecto de las comunidades verdes, durante el mes de agosto, Asturias y Cantabria crecieron un 7,8 y un 2,5 por ciento respectivamente, mientras que Galicia bajó un 1,3 por ciento. En el conjunto del año, el balance en estas comunidades es negativo, con un descenso del 13,5 por ciento en Asturias, del 6,7 en Cantabria y del 8 por ciento en Galicia. Porras señaló que "es difícil sacar una conclusión clara respecto de las causas de este comportamiento" y no descartó que pudiera ser provocado por el vertido del Prestige, aunque "hay otros factores como climatológico o la situación económica de nuestros mercados emisores, e incluso la desviación a destinos con ofertas baratas". En cuanto a mercados emisores, el Reino Unido y Francia crecieron un 7,4 por ciento y un 16,9 por ciento cada uno, en tanto que Alemania, Holanda, Bélgica, Italia o Portugal, bajaron un 6,8, un 16,5, un 19,6, un 8 y un 12,2 por ciento respectivamente. Asimismo, Porras señaló que el turismo individual creció en agosto un 54 por ciento y añadió que es posible que este año supere al de paquetes turísticos.
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