Los turoperadores británicos y alemanes que trabajan con los hoteles de la Costa Blanca han aplazado hasta el próximo mes de enero el inicio de las negociaciones de los contratos para el verano de 2004. Una decisión sin precedentes y que se enmarca en la campaña de presión sobre los precios a la que están sometidos los empresarios desde hace dos temporadas. Habitualmente, las cadenas de la provincia iniciaban los contactos en octubre para cerrarlos durante el último trimestre del año y firmarlos en el marco de la feria Fitur en Madrid.
Los turoperadores británicos y alemanes que trabajan con los hoteles de la Costa Blanca han aplazado hasta el próximo mes de enero el inicio de las negociaciones de los contratos para el verano de 2004. Una decisión sin precedentes y que se enmarca en la campaña de presión sobre los precios a la que están sometidos los empresarios desde hace dos temporadas. Habitualmente, las cadenas de la provincia iniciaban los contactos en octubre para cerrarlos durante el último trimestre del año y firmarlos en el marco de la feria Fitur en Madrid. La nueva vuelta de tuerca de los grandes operadores turísticos llega en un momento especialmente delicado para los hoteles alicantinos, que cerrarán el año 2004 con una media de ocupación del 90% pero con una caída del 6% en su rentabilidad, ya que la política de ofertas les llevó a bajar sus tarifas para llenar sus plazas durante la temporada alta. De cara a la próxima negociación, los hoteleros temen que los tour operadores intenten cancelar clausulas que ya estaban consolidadas como la garantía de ocupación -las plazas reservadas se pagan aunque luego no se ocupen-. El malestar empresarial se hizo latente en la última asamblea de l patronal Zontur, en la que los hoteleros decidieron reclamar al Gobierno un mayor esfuerzo inversor en la promoción de España como destino de «sol y playa» de Europa. Turespaña destina anualmente unos 26 millones de euros para este apartado «cuando hay países que con tres veces menos de turistas que nosotros invierte el triple en promoción», apuntaron ayer fuentes de la patronal. Por otro lado, los empresarios también lamentan que los tour operadores dispongan siempre de una información detallada sobre los balances económicos de los hoteles, lo que en definitiva se convierte en otro argumento a favor para negociar los precios. Sin embargo, la opacidad de los estados donde los mayoristas tienen su sede social, permite que los empresarios carezcan de información fiable sobre los balances, «por lo que todos los años debemos escuchar que están perdiendo dinero cuando destinos como Benidorm son extraordinariamente rentables», afirmaron fuentes de Hosbec. (F.J.B., diario Inormación, 15/10/03)
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