Qantas encuentra más fisuras en las alas de sus A380

La revisión fue solicitada al fabricante aeronáutico europeo el mes pasado, a través de una circular, por la Agencia de Seguridad Aérea Europea (EASA, por sus siglas en ingles) para las 68 aeronaves del modelo que se encuentran actualmente en servicio en todo el mundo, luego que la aerolínea australiana detectara el problema en los amarres de una de las alas de la aeronave, que produjo unas grietas de unos dos centímetros.

Posteriormente, Emirates, la aerolínea más grande de los Emiratos Árabes Unidos, con sede el Aeropuerto Internacional de Dubái, reportó el mismo problema en algunos de sus superjumbos. El presidente de la aerolínea, Tim Clark, anunció luego que Emirates perderá 68 M € por las grietas en los superjumbo A380.

La primera compañía que lo incorporó a su flota, en 2007, fue Singapore Airlines, a la que siguieron Emirates, Qantas, Air France, Lufthansa, Korean Airlines y China Southern.

Otra indemnización

El portavoz de Qantas ha informado de que "hasta la fecha hemos sometido a inspecciones a dos aviones y hemos hallado en ambos evidencias limitadas de fisuras. Los dos aparatos ya han sido reparados".

Ahora, la empresa australiana evalúa la posibilidad de pedirle a Airbus una indemnización por los problemas que le ha causado las inspecciones y reparaciones de estos aparatos, según la prensa local. "Estamos discutiendo con Airbus sobre los costes de las inspecciones y las reparaciones", ha apuntado el portavoz.

Los ingenieros de Qantas hallaron recientemente un "limitado número" de fisuras del "tipo 2" y se encuentran en las alas de dos de los aviones del modelo gigante de Qantas.

Uno de estos aviones afectados sufrió en noviembre pasado una explosión de sus motores en pleno vuelo en noviembre de 2010 y desde entonces está en tierra para ser reparado en Singapur.

Qantas someterá a otro de sus doce aviones A380 a una inspección mecánica el próximo mes, en cumplimiento con la orden de la Agencia Europea de Seguridad Aérea que obliga a estos chequeos cuando los aparatos alcanzan los 1.300 vuelos.

"Las grietas no representan un riesgo a la seguridad de los A380 y las inspecciones de la AESA suponen la respuesta apropiada al problema", manifestó un portavoz de Qantas.