Ocho aeropuertos españoles financiados por la UE no son rentables y cinco, insostenibles
España ha recibido casi la cuarta parte de los recursos europeos para este tipo de inversión
Publicada 16/12/14El Tribunal de Cuentas Europero ha publicado este martes su informe final sobre la evaluación realizada al destino de los fondos recibidos para ampliaciones y mejoras de infraestructuras aeroportuarias por cinco Estados miembros de la Unión Europea (UE), entre ellos, España. En el documento denuncia que ocho aeropuertos españoles que han recibido financiación comunitaria para su ampliación (Madrid-Barajas, Badajoz, Burgos, Fuerteventura, Córdoba, La Palma, Murcia y Vigo) no han generado los resultados esperados, no son rentables y están infrautilizados debido a la falta de planificación y previsión adecuadas. Algunas conclusiones fueron adelantadas este lunes (ver: El Tribunal de Cuentas Europeo censura el derroche español en aeropuertos).
El Tribunal sostiene que ninguno de los aeropuertos españoles financiados con ayudas de la UE tiene perspectivas de rentabilidad. Tres de ellos (Fuerteventura, Madrid-Barajas y Murcia) tienen perspectivas de lograr un equilibrio a medio plazo, pero el resto (Badajoz, Burgos, Córdoba, La Palma y Vigo) registraron pérdidas significativas entre 2007 y 2012 y son insostenibles. Además, Fuerteventura, Madrid, Vigo, Murcia, La Palma y Badajoz tenían incluso menos pasajeros en 2013 que en 2007.
El informe señala en primer lugar que no había ninguna necesidad urgente de ampliar aeropuertos como los de Badajoz (en la que se gastaron 6 millones de euros de la UE) Córdoba y Fuerteventura. Las infraestructuras existentes eran suficientes para hacer frente a la demanda prevista y las ampliaciones están infrautilizadas.
En el caso de Córdoba, el Tribunal de Cuentas señala que el tráfico atraído por los cercanos aeropuertos de Málaga y Sevilla, así como la conectividad que proporciona el AVE, limitan significativamente la demanda para este aeropuerto. Sin embargo, las autoridades españolas decidieron ampliar la pista sin ningún análisis o estudio que justificara su necesidad. La ampliación de la pista costó más de 70 millones de euros, de los cuales 12,6 millones venían de la UE. También se extendió el área de estacionamiento de los aviones con un coste de 1,5 millones (810.000 de la UE).
"Desde entonces hay muy poco tráfico comercial en este aeropuerto (menos de 7.000 pasajeros cuando la previsión era de 179.000), la pista extendida apenas se usa y el incremento de espacio de estacionamiento se utiliza para aviones no comerciales", censura el estudio.
En el aeropuerto de Fuerteventura se amplió la terminal con financiación de la UE por valor de 21 millones de euros. El proyecto casi triplicó la superficie existente, añadió 14 nuevas puertas de embarque, 8 cintas de equipaje y 4 puertas de contacto. Las obras se basaron en una previsión de 7,5 millones de pasajeros en 2015, cuando en 2013 el aeropuerto tuvo 4,3 millones. El Tribunal dice que incluso aunque se hubiera cumplido la previsión, el proyecto estaba sobredimensionado. En la actualidad, la autoridad aeroportuaria ha decidido cerrar 6 de las 24 puertas para reducir los costes de mantenimiento.
Por lo que se refiere a La Palma, el informe dice que aunque había necesidad de ampliar la capacidad, el proyecto -que costó 36,4 millones de euros con una financiación europea de 17,1 millones- no se ajusta a las necesidades reales. La nueva infraestructura permite gestionar 30 movimientos por hora, mientras que el pico desde que se completó la expansión ha sido de 13. "Por ello, la capacidad adicional creada continuará estando infrautilizada" hasta que el número de operaciones aumente de forma significativa.
En el caso de Burgos, debido al bajo número de pasajeros (18.905 en 2013) y a los altos costes de depreciación de la infraestructura, el aeropuerto acumuló pérdidas de 30 millones de euros (el 67% de sus activos) desde su apertura en julio de 2008 hasta finales de 2012. Además, el 90% de sus vuelos comerciales están operados por una única compañía y con un único destino (Barcelona) y los viajeros tienen al menos cinco alternativas para volar desde aeropuertos cercanos, con lo que existe un "alto riesgo de que continúe teniendo un número de pasajeros insosteniblemente bajo".
El Tribunal de Cuentas señala que el aeropuerto de Murcia-San Javier es el que registró mayores retrasos, ya que la torre de control y la pista sólo se han puesto en funcionamiento cinco años después de haberse completado. El mayor sobrecoste entre los aeródromos examinados corresponde a La Palma, con 25,6 millones.
El informe considera que, tras las ampliaciones financiadas con ayudas europeas, las terminales de Fuerteventura, Vigo, La Palma y Badajoz están infrautilizadas. El coste por pasajero adicional en Madrid fue de 32 euros, mucho más alto que los 19 euros utilizados en la fase de planificación. Para Fuerteventura, Burgos, Murcia, La Palma, Badajoz y Córdoba, el coste estimado es más del doble que el previsto. "Esto indica que las inversiones tienen un alto riesgo de no proporcionar un retorno", dice el Tribunal de Cuentas. Para Vigo, el coste estimado por pasajero adicional no puede calcularse porque la inversión no atrajo a ningún viajero extra.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta noticia no tiene comentarios.