La huelga del 20 de julio afectará a las reservas y la imagen de Baleares

En el caso de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) aseguran que el paro de 24 horas previsto podría afectar a las reservas de última hora. Según ha explicado a HOSTELTUR noticias de turismo la gerente de la FEHM, Inmaculada de Benito, “la federación está evaluando en estos momentos la situación y mantiene su llamada al diálogo a los sindicatos para que pueda retomarse la mesa de negociación”. Y espera que esto pueda suceder “lo antes posible”.

De parte de los sindicatos, la secretaria general de FECOHTde CCOO de Baleares, Angels Sánchez, ha explicado a este diario que consideran que no había otra vía que plantear la huelga. “Somos conscientes de que puede perjudicar la imagen en cierta manera pero no nos ha quedado más remedio”. “Llevamos desde febrero negociando y las posturas están muy distanciadas”. Asegura que hay puntos muy importantes del convenio para los trabajadores, que de ceder “supondría la pérdida de derechos conseguidos durante muchos años” más allá de las subidas salariales.

En cualquier caso confían en poder retomar el diálogo antes del 20 de julio. “Esperamos que ni aquí ni en otros territorios donde se están negociando convenios de hostelería -como Málaga, Tenerife o Alicante- se use la excusa de la crisis para eliminar derechos”, añade.

Desde la FEHM señalan, sin embargo, que aceptar la totalidad o alguno de estos puntos que defienden los sindicatos sería "pondría en peligro la viabilidad de muchas empresas hoteleras".

Preocupación entre las empresas de ocio

De la parte de la patronal a quienes señalan el perjuicio de la huelga se ha sumado hoy la Asociación Mallorquina de Atracciones Turísticas (AMAT). Su presidente, Antonio González Clemente, ha manifestado el temor que tienen todos sus asociados ante el impacto negativo que el anuncio de una posible huelga en el sector hotelero”. Y añade que “el pasado invierno ha sido muy difícil para todos puesto que ha sido la peor temporada de los últimos 10 años, por lo que el sector turístico de Baleares, que es el que más empleo genera en el archipiélago y del que dependen muchas familias, confía en que los resultados que se obtengan durante el verano permitan compensar las pérdidas hibernales, al tiempo que generen nuevos puestos de trabajo previstos para cubrir el aumento de la demanda estival”.

“Teniendo en cuenta que este año la contratación está siendo muy tardía, entre otros factores debido a los canales online, que son más inmediatos y se reservan con menos anticipación, AMAT cree que la incertidumbre que genera entre los viajeros la celebración de una posible huelga en Baleares, puede hacer que los turistas europeos y nacionales desestimen pasar sus vacaciones en las islas y opten por otros destinos del Mediterráneo”.

Si esto sucede, agrega, “el impacto de la huelga, incluso de su simple anuncio, será muy negativo y generará lo contrario de las mejoras que se reivindican, ya que la bajada de la demanda y de los ingresos tendrá un efecto inmediato en el empleo, en el existente y en el que se podría crear si el verano funciona como todos esperamos”. González concluye que “sin poner en duda el legítimo derecho a la huelga que tienen todos los trabajadores, apelamos al sentido común, que dicta que la máxima prioridad en estos momentos es hacer todo lo posible para evitar cualquier circunstancia que complique aún más la difícil situación de la economía y que, además, en el caso de esta huelga, podría tener tan negativo impacto no solo en los trabajadores de las empresas turísticas, también en el resto de los trabajadores cuyos puestos de trabajo tienen también una importante dependencia del turismo y que serán víctimas de una decisión tan errónea como negativa”.