Uber anuncia su cierre en España

Tras nueve meses de funcionamiento, inicialmene en Barcelona y después en Madrid y Valencia, Uber, la aplicaicón que pone en contacto a usuarios y conductores particulares para servicios de transporte interurbano, anuncia su cierre en España.

La aplicación generó numerosas protestas por parte del gremio del taxi en las tres ciudades. En Madrid, la Asociación Madrileña del Taxi, que acusa a la empresa estadounidense de competencia desleal, consiguió que su demanda prosperase y el juzgado de lo Mercantil número 2 de Madrid ordenó cautelarmente el cese de las actividades en toda España y de la utilización de su aplicación uberPOP, el 9 de diciembre.

En Cataluña, la Generalitat ha notificado ya 28 multas a esta empresa y otras 28 a conductores detectados, y tiene en trámite otros 72 expedientes (36 de Uber y 36 de conductores), dado que la administración expedienta en cada caso a la compañía y al conductor.

Desde Uber aseguran que el cierre en España no es definitivo, aunque no establecen una fecha para reanudar la actividad, seguirá con el litigio abierto en los juzgados con el objetivo de lograr un marco legal favorable, al tiempo que prevén estudiar otras alternativas de transporte de pasajeros entre particulares que se ajusten a la ley.

A través de un comunicado, el responsable de la firma en España, Carlos Lloret, asegura que procede al cierre de la compañía en España "mientras apelamos a la sentencia judicial y evaluamos nuevas opciones para dar a los españoles acceso a viajes seguros y cómodos". Añade que su empresa va a colaborar "para desarrollar el nuevo y necesario marco regulatorio para crear un espacio justo para Uber y la economía colaborativa".

La firma mantiene su apelación a la sentencia judicial. Imagen Shutterstock

En su nota, recuerda que "la Comisión Nacional de los Mercados y La Competencia (CNMC) ha dejado claro que las restricciones de transporte actuales son contrarias a la competencia y restringen la entrada de nuevos agentes en el mercado, en perjuicio de los consumidores". E insiste en que dicha entidad ha fijado "la necesidad de regular la economía colaborativa a favor de los consumidores"..

España no es el único país donde Uber ha tenido problemas. En Francia, la aplicación será ilegal desde el 1 de enero y su utilización podría ser sancionada con penas de dos años de cárcel y multas de 300.000 euros, según afirmó el portavoz del Ministerio del Interior galo, Pierre-Henry Brandet.

Hace sólo unas semanas también Holanda y Nueva Delhi prohibían la actividad de Uber. En el caso del país europeo se consideró que se trata de un servicio ilegal. Mientras, en la ciudad india se llegó a detener a un conductor acusado de contravenir las normas de transporte y de violación.

En Berlín se ordenó también el uso de este tipo de aplicaciones en agosto. Unos días más tarde el Tribunal Regional de Frankfurt dictaba una resolución provisional que impedía a la compañía operar en todo el país, aunque unas semanas después revocaba la medida, permitiendo la continuidad de Uber.