La XXIV edición de Fitur cierra con expectativas de crecimiento en el turismo

La XXIV edición de la Feria Internacional de Turismo (Fitur) cerró ayer domingo sus puertas y lo hizo con la expectativa de que el turismo va a crecer en el futuro, pese a la cifra de caída del 2003, un 1,7 por ciento a nivel mundial, anunciada estos días por el secretario general de la OMT, Francesco Frangialli. La participación que ha tenido la feria, primera del año del sector, más de 11.000 empresas provenientes de 170 países, ha dejado patente que el "fenómeno del turismo es imparable", tal y como recordó el ministro de Economía, Rodrigo Rato, en el acto de inauguración del evento el pasado 28 de enero. Ni los problemas que han causado los diferentes conflictos bélicos recientes, ni la famosa epidemia de neumonía atípica aparecida en el Sudeste Asiático, ni los recuerdos aún en el subconsciente de más de uno del atentado terrorista del 11S, ha evitado que durante cinco días el recinto ferial Juan Carlos I de Madrid presente un aspecto extraordinario de participación. Fitur, según los organizadores, ya se ha granjeado un hueco entre los grandes eventos del turismo mundial, y compite codo con codo con la Feria de Londres y la de Berlín, por ser la primera. Las cifras de este año no pueden ser más rotundas, ya que según la organización han participado más de 11.000 empresas (10.000 en la pasada edición), provenientes de 170 países que han ocupado, por vez primera, los diez pabellones del recinto ferial. Pero si esas cifras son importantes ya de por sí, aun lo son más la de participantes profesionales que se han aproximado, según los organizadores, a los 100.000, con un incremento de un 5 por ciento con respecto a los 97.570 de la pasada edición. Lo mismo ha ocurrido en la presencia del público en general, que han tenido dos días, sábado 31 de enero y domingo 1 de febrero, para visitar la feria y llevarse algún recuerdo y la descripción informativa del viaje soñado. En la pasada edición se registró la entrada en dos días de 113.000 personas, y para la actual, todo hace indicar que pese a los 6 euros de entrada que hay que pagar por recorrer los pabellones, esa cifra se ha superado con creces. El pasado 28 de enero fue inaugurado el evento por los Reyes, Don Juan Carlos y Doña Sofía, que una vez más con su presencia respaldaron al sector e hicieron recordar a todos lo importante que es para España el sector turístico. Recordatorio en el que abundó el vicepresidente primero del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, al destacar que el turismo representa el 12 por ciento del PIB, y que durante el 2003 han llegado a España algo más de 52 millones de turistas extranjeros que hasta octubre (últimas cifras que tiene tabuladas el Banco de España) han permitido ingresar por ese concepto un total de 31.000 millones de euros en nuestras arcas. La feria también ha servido para que la Organización Mundial del Turismo (OMT) que ha estrenado titularidad como organismo de la ONU, volviese a reconocer, un año más, que mientras en el resto del mundo las cosas van regular, en España sigue subiendo el número de personas que nos visitan. Durante 2003 el turismo mundial decreció 1,7 puntos, mientras que la cuenca mediterránea creció cero y España aumentó la llegada de turistas en un 0,28 por ciento, lo que parece bastante si se compara con el resto de países competidores que no crecieron nada.En cuanto a la feria en sí, esta vez hubo récord de participación por la parte extranjera, que aumentó su presencia en un 19,4 por ciento, con gran incidencia de los casos de Africa (30,7%), Africa del Norte y Oriente Próximo (28,2%) y de Asia y Pacífico (26,7%). En este ámbito destacaron como nuevos países con representación oficial, Benin, Costa del Marfil, Jamaica, Letonia, Malta y Eslovenia. Dentro de las demostraciones más importantes, destacaron las ofrecidas por la cultura y el deporte, que tomaron protagonismo por encima de las tradicionales ofertas de vacaciones y el sol y playa internacional. Las Olimpiadas de este verano en Atenas, y la próxima Copa de Europa de Fútbol de Portugal de este año, por un lado, y el anuncio de citas puntuales como el Año de Mozart presentado por Austria para el 2006, o la cultura en su esencia salvaje, como la promovida por Jordania con Petra y Mar Muerto, o Perú y las ruinas de Machu Pichu y otros restos incaicos, destacaron en la participación internacional. Por parte española, las Comunidades echaron el resto y ocuparon los pabellones que tenían previstos, sin dejar un hueco, destacando en este caso la participación, cada vez mayor, de las ciudades que tienen algo que decir y que ofrecer a los visitantes. El año de Dalí y el Xacobeo 2004, fueron los protagonistas más importantes de la cita por parte española. Una cita que cumple su veinticuatro aniversario y cuya realidad actual contrasta bastante cuando recordamos que la primera edición de 1981 tuvo una participación de 1.500 expositores provenientes de 37 países.