Directivos de Aerolíneas Argentinas fueron agredidos ayer en el aeropuerto de Ezeiza durante una protesta de personal técnico de la compañía, que secundó una huelga sorpresiva por la que debieron suspenderse varios vuelos internos.
Directivos de Aerolíneas Argentinas fueron agredidos ayer en el aeropuerto de Ezeiza durante una protesta de personal técnico de la compañía, que secundó una huelga sorpresiva por la que debieron suspenderse varios vuelos internos.
El portavoz de la firma, propiedad del grupo español Marsans, Julio Scaramella, dijo a EFE que mientras era entrevistado por un periodista un grupo de manifestantes arrojó piedras contra ambos y luego les agredió "a patadas, trompadas y con palos".
Scaramella relató que, unos minutos antes, el gerente de Recursos Humanos de la empresa, Esteban Maccari, "fue recibido con una lluvia de tornillos" lanzados por trabajadores que portaban banderas del sindicato Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA), quienes montaron un piquete en un sector del aeropuerto internacional de Ezeiza, situado a las afueras de Buenos Aires, donde Aerolíneas presentaba ayer oficialmente su nuevo simulador de vuelos de Boeing 737, único en Latinoamérica, indicó.
"Hostigaron a toda la gente que vino al acto, entre ellos directivos extranjeros de Boeing, su filial Alteon (fabricante de los simuladores) y de otras empresas aéreas, pero no lograron impedir su realización", señaló Scaramella y precisó que mientras se producían los desmanes "se acercó personal de seguridad de Aerolíneas y efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que montaron un cordón de seguridad" para impedir que continuasen las agresiones.
"Los manifestantes eran unos 150 y ninguno fue detenido. Más allá de la denuncia que realizará la compañía a nivel corporativo, yo voy a iniciar una acción penal contra APTA por estos hechos", manifestó.
Scaramella sostuvo que durante tres horas el sindicato de técnicos aeronáuticos mantuvo una huelga sorpresiva, lo que provocó la suspensión de varios vuelos internos, dentro del territorio argentino, pero no afectó las frecuencias internacionales.
El dirigente de APTA, Juan Papalardo, declaró a su vez que la medida de fuerza se hizo para reclamar "la reincorporación de empleados despedidos, la incorporación de los contratados, aumento salarial y libertad sindical".
El acto de presentación del nuevo simulador de vuelos, que se utiliza para el adiestramiento de los pilotos de Aerolíneas, fue encabezado por el vicepresidente de la compañía, el español José María Llodrá.
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