Las declaraciones realizadas hace unos días por el presidente cubano, Fidel Castro, sobre el control de los cruceros que visitan Cuba ha provocado una polémica ante la que ha salido al paso el ministro de Turismo de Cuba (de visita en España la semana pasada para asistir a la Cumbre de Ministros de Zamora), y también ha provocado la reacción de Pullmantur, primera compañía de cruceros española y que mantiene actividad en Cuba.
Las declaraciones realizadas hace unos días por el presidente cubano, Fidel Castro, sobre el control de los cruceros que visitan Cuba ha provocado una polémica ante la que ha salido al paso el ministro de Turismo de Cuba (de visita en España la semana pasada para asistir a la Cumbre de Ministros de Zamora), y también ha provocado la reacción de Pullmantur, primera compañía de cruceros española y que mantiene actividad en Cuba.
Fidel Castro declaraba que "nos vienen hoteles flotantes, restaurantes flotantes, teatros flotantes, diversión flotante (?), visitan los países para dejarles basura y unos miserables centavos". Estas afirmaciones han sido matizadas por Manuel Marrero, ministro cubano de Turismo, que ha manifestado a diversos medios que "esas declaraciones han sido malinterpretadas y sacadas de contexto", asegurando que Cuba no va a prohibir la llegada de cruceros extranjeros a sus puertos, sino que van a controlar que respeten la normativa cubana en esta materia.
Marreró señaló que el 90% de los cruceros que navegan por el Caribe son de Estados Unidos, y criticó que estos barcos no generan riqueza en los destinos, ya que los turistas no bajan de los barcos cuando atracan en puerto.
PULLMANTUR PREVÉ RENOVAR EL CONTRATO CON CUBA, QUE SE CUMPLE EN 2007
A este respecto, el subdirector general de Pullmantur, Malik Alkarea, ha declarado a HOSTELTUR que "nosotros no tenemos ninguna duda sobre nuestra actividad en Cuba. Seguiremos llevando cruceristas españoles a la Isla. Nuestro contrato cumple en 2007, pero posiblemente lo renovemos, ya que nuestra actividad es muy bien aceptada en Cuba, según nos ha asegurado la semana pasada el ministro de Turismo de Cuba, y este producto es muy valorado por nuestros clientes".
Y sobre las declaraciones de Fidel Castro y Marrero, el ejecutivo del turoperador español indica que "el comportamiento del turista español es muy diferente al del norteamericano. El español, cuando el barco atraca en el puerto, baja a conocer la ciudad y realiza un importante volumen de gasto en compras. De hecho, entre el 80% y el 90% de nuestros clientes contratan excursiones en tierra. Por el contrario, el crucerista de Estados Unidos es "miedoso" y se queda en el barco, donde realiza todo el gasto".
Pullmantur tiene actualmente el crucero Holiday Dream operando en el Caribe. "El barco está dos días en La Habana, y el 80% de los cruceristas realizan una estancia de una semana en hoteles en tierra. Desde el 22 de noviembre hasta el pasado 29 de agosto hemos transportado en este buque a 30.000 turistas", asegura Alkarea.
RÁPIDA REACCIÓN DE MÉXICO
Por otro lado, en medio de esta polémica, las autoridades turísticas de México se han mostrado dispuestas a recibir en sus puertos el tráfico de cruceros que las autoridades cubanas rechacen por no ser rentable el atraque en sus ciudades. Según estimaciones de la administración turística mexicana, Cuba ha estado recibiendo en torno a los 900.000 cruceristas al año, que generan unos ingresos de unos 250 millones de euros. Para captar parte de este negocio, México tiene previsto incrementar sus campañas promocionales en Estados Unidos, Canadá, y varios países europeos, entre ellos España. (José Manuel de la Rosa / HOSTELTUR) (delarosa@hosteltur.com)
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