La empresa promotora del complejo turístico Atrium Beach, de Villajoyosa, Hotel Luna S.A., ha constituido un gabinete de crisis en el que técnicos y abogados están estudiando las medidas que se llevarán a cabo para hacer frente a las sanciones impuestas por la Consejería de Territorio y Vivienda de la Comunidad Valenciana por un exceso de edificabilidad, sanciones en base a las cuales la promotora tendrá que derribar 14.470 metros cuadrados del hotel, además de hacer frente a una multa de 12 millones de euros.
La empresa promotora del complejo turístico Atrium Beach, de Villajoyosa, Hotel Luna S.A., ha constituido un gabinete de crisis en el que técnicos y abogados están estudiando las medidas que se llevarán a cabo para hacer frente a las sanciones impuestas por la Consejería de Territorio y Vivienda de la Comunidad Valenciana por un exceso de edificabilidad, sanciones en base a las cuales la promotora tendrá que derribar 14.470 metros cuadrados del hotel, además de hacer frente a una multa de 12 millones de euros.
Fuentes de Hotel Luna consultadas por HOSTELTUR aseguraron ayer que el gabinete de crisis trabaja tanto con la posibilidad de buscar soluciones técnicas para cumplir la sanción ejecutando un plan de demolición, en cuyo caso "habría que ver en qué parte se pueden hacer los derribos, ya que quitar plantas del hotel es extremadamente difícil porque no se pueden tocar las guías antisísmicas", como con la posibilidad de recurrir a los tribunales, en cuyo caso, advirtieron estas fuentes, "el proceso se podría dilatar otros diez años en el tiempo, cuando ya llevamos dos años desde que la obra nos fue paralizada, en septiembre de 2003".
La empresa promotora del Atrium Beach ha calificado de "desproporcionada, monstruosa, especialmente dura e inaceptable" la decisión de la Consejería de Territorio y Vivienda, ya que, asegura, "obliga a demoler una superficie 2,18 veces superior a la exigida inicialmente por el Ayuntamiento de Villajoyosa", entidad con la que Hotel Luna llegó el pasado mes de agosto a un acuerdo para hacer frente al exceso de edificabilidad, según se contempla en el Plan General de Ordenación Urbana de la localidad.
ACUERDO INICIAL
En aquel momento, Ayuntamiento y empresa promotora llegaron a un acuerdo con la confección de un Plan de Reforma Interior en base al cual Hotel Luna se comprometía a derribar parte del hotel, concretamente 6.223 metros cuadrados, ceder 21.499 metros cuadrados de terreno para la construcción de dotaciones públicas y aportar 1,5 millones de euros destinados a oficinas públicas en torno al hotel, si bien este acuerdo estaba pendiente de la autorización de la Consejería de Territorio, que finalmente no ha dado el visto bueno a la cantidad de metros a derribar acordada.
Hotel Luna lamenta que los cálculos relativos al exceso de edificabilidad se hayan hecho desde que se inició el proceso "en base a mediciones y planeamientos urbanísticos que no estaban en vigor cuando se autorizó el hotel, primero se habló de un exceso de 80.000 metros cuadrados y luego lo rebajaron a 53.000", y que en estos dos años no haya habido "mediciones imparciales ordenadas por un juez".
Además, reitera que el Gobierno valenciano no ha tenido en cuenta "las dos licencias de obra en nuestro poder, lo que nos sitúa en una situación de inseguridad jurídica, ni la reiterada calificación de interés público concedida en diversas ocasiones al proyecto", que entre otras cuestiones pretendía levantar el hotel turístico más grande de Europa, con 1.250 habitaciones, crear numerosos puestos de trabajo en la localidad y ejecutar en el conjunto del complejo una inversión superior a los 300 millones de euros.
En cuanto a la sanción económica impuesta por la Consejería, ésta sí que está recurrida ya ante los tribunales "porque se ha impuesto de acuerdo al total de lo construido y no al supuesto exceso de volumen", informaron estas mismas fuentes. Añadieron que los perjuicios económicos para la promotora Hotel Luna desde que se paralizaron las obras del Atrium Beach ascienden a 50 millones de euros, en concepto de indemnizaciones a los contratistas, costes legales, lucro cesante y el precio de la demolición ordenada. Una situación que además ha obligado a la compañía a poner en venta "activos no estratégicos", como un bloque de apartamentos turísticos en Benidorm, para capitalizarse y poder hacer frente a todos los gastos que está conllevando el expediente.
LA VERSIÓN DE LA CONSEJERÍA
Por su parte, el consejero de Territorio y Vivienda de la Comunidad Valenciana, Rafael Blasco, ha asegurado que en el caso del Hotel Atrium el Gobierno Valenciano ha aplicado la sanción máxima prevista por la Ley. "Se trata de la mayor sanción urbanística impuesta nunca en España, y nadie puede discutir la decisión del Consell porque ningún Gobierno había adoptado hasta ahora una sanción tan drástica, aplicando el tope legal en un caso de indisciplina urbanística", ha dicho.
Blasco ha afirmado que la resolución de la Consejería, "por su estricta sujeción al ordenamiento jurídico, ha sido mucho más severa y ha ido mucho más allá de la propuesta de demolición que planteaba el Ayuntamiento de Villajoyosa", si bien en todo caso la decisión del departamento autonómico, "adoptada dentro de sus límites competenciales, respeta al máximo la autonomía municipal, ya que son los ayuntamientos los que tienen la principal competencia en materia urbanística".
El consejero también ha recordado que la orden de demolición adoptada por la Consejería de Territorio y Vivienda "ha contado con el respaldo unánime de la Comisión Territorial de Urbanismo de Alicante, donde la representación es plural y eminentemente técnica. En dicho comisión hubo unanimidad de todos los representantes de la Generalitat, de la Administración del Estado, del Colegio Oficial de Arquitectos y de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias". (Laura Puebla/HOSTELTUR) (hoteles@hosteltur.com).
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