Los Gobiernos español y francés pactaron ayer en Barcelona un paquete de proyectos de mejora de las conexiones viarias y ferroviarias a través de los Pirineos, que incluye la prolongación de la línea de AVE Madrid-Barcelona-Frontera Francesa hasta Montpellier, por lo que quedaría garantizada su continuidad. El gobierno vasco decidió no suscribir el acuerdo, ya que no recoge el compromiso de tener en marcha la llamada 'Y' vasca en 2012.
Los Gobiernos español y francés pactaron ayer en Barcelona un paquete de proyectos de mejora de las conexiones viarias y ferroviarias a través de los Pirineos, que incluye la prolongación de la línea de AVE Madrid-Barcelona-Frontera Francesa hasta Montpellier, por lo que quedaría garantizada su continuidad. El gobierno vasco decidió no suscribir el acuerdo, ya que no recoge el compromiso de tener en marcha la llamada 'Y' vasca en 2012.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, subrayó que el "plan de acción en infraestructuras" constituye un "programa de trabajo con plazos concretos". Uno de los puntos principales, según resaltó el primer ministro francés, Dominique de Villepin, es la "prolongación" del AVE desde Perpignan, donde estaba previsto que acabara, "hasta Montpellier y Nimes".
Esta era un de las reivindicaciones más repetidas desde Cataluña, por el temor a llegar a 2009 con el AVE hasta Perpiñan pero tener que continuar luego en tren convencional hacia Montpellier. Respecto al cumplimiento de esta fecha, 2009, para tener lista la alta velocidad entre Barcelona y la frontera francesa, Zapatero aseguró que "los plazos están para cumplirlos", después de que ambos gobiernos hayan realizado un "análisis técnico" y aúnen su "voluntad política" con el correspondiente "apoyo financiero".
El plan de acción incluye, además de la conexión del AVE entre Figueres y Montpellier; la de Vitoria-Dax, la llamada "Y" vasca; la conexión Zaragoza-Canfranc-Pau, y una nueva travesía ferroviaria transpirenaica de gran capacidad.
Por otra parte, los dos Ejecutivos acordaron poner en marcha en 2007 una primera línea de "short sea shipping", conocido como "autopistas del mar", es decir, líneas regulares de transporte de mercancías marítimas con origen y destino entre España y Francia. La intención es disponer de dos de estas líneas, una en el Cantábrico y otra en el Mediterráneo.
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