La Comisión Europea propuso ayer poner fin desde el 1 de enero de 2007 a la exención sobre la normativa de competencia de la que se beneficia la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) en la fijación de tarifas para las rutas dentro de la UE. La propuesta establece un periodo transitorio, hasta el 31 de diciembre de 2006, para dar a IATA margen para trabajar en acuerdos alternativos al actual modelo.
La Comisión Europea propuso ayer poner fin desde el 1 de enero de 2007 a la exención sobre la normativa de competencia de la que se beneficia la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) en la fijación de tarifas para las rutas dentro de la UE. La propuesta establece un periodo transitorio, hasta el 31 de diciembre de 2006, para dar a IATA margen para trabajar en acuerdos alternativos al actual modelo.
La intención del Ejecutivo comunitario es revisar el sistema de "conferencias tarifarias" que exime a IATA (que agrupa a 265 compañías de todo el mundo) de cumplir las reglas comunitarias sobre prácticas comerciales restrictivas y que está vigente desde 1993.
Las citadas "conferencias tarifarias" reducen la competencia de precios entre las compañías aéreas pero también benefician al usuario al establecer el denominado "sistema interlínea", que permite usar un solo billete para un viaje compuesto por varios vuelos de compañías diferentes y evita tener que recoger el equipaje en los aeropuertos de tránsito.
Para las rutas entre la UE y terceros países, la propuesta es mantener la exención hasta el 30 de junio de 2008, a la espera de que las compañías participantes proporcionen a la Comisión Europea información que permita una revisión detallada de la situación en ese año. El Ejecutivo comunitario iniciará ahora una ronda de consultas a los Veinticinco y a las partas interesadas, antes de tomar en 2006 una decisión definitiva sobre el sistema de exenciones.
La comisaria de Competencia, Neelie Kroes, señaló en un comunicado que el actual modelo parece facilitar la aplicación del "sistema interlínea" en las rutas a terceros países, pero no ve tan claro que beneficie a los pasajeros que conectan vuelos dentro de la Unión. En su opinión, no es seguro que, en las rutas dentro de la UE, las ventajas para los usuarios compensen los riesgos a la restricción de la competencia, dado que los precios se pactan dentro de IATA, pero sí está claro su efecto positivo en las rutas a otros países.
El "sistema interlínea" de IATA es uno de los cuatro que existen, junto a las alianzas globales de aerolíneas, los acuerdos de código compartido y los acuerdos bilaterales, y opera con precios pactados por todas las empresas de IATA en las "conferencias tarifarias".
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