Los pilotos y técnicos de Aerolíneas Argentinas que estaban en huelga desde hace más de una semana aceptaron el viernes un acuerdo con la empresa y suspenderán la medida de fuerza una vez que el convenio sea firmado en el Ministerio de Trabajo.
Los pilotos y técnicos de Aerolíneas Argentinas que estaban en huelga desde hace más de una semana aceptaron el viernes un acuerdo con la empresa y suspenderán la medida de fuerza una vez que el convenio sea firmado en el Ministerio de Trabajo.
Juan Pappalardo, titular de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), uno de los gremios en conflicto, indicó que la clave del acuerdo fue la llegada de "un nuevo interlocutor", en alusión a Gerardo Díaz, uno de los principales accionistas del grupo español Marsans, que controla a la aerolínea. "Por unanimidad se ha decidido aceptar la propuesta", enfatizó Pappalardo y confirmó que los vuelos de la compañía se reanudarán "esta misma tarde" si no hay imprevistos.
Minutos después de este anuncio, representantes de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) aseguraron que también aceptaron el acuerdo, aunque subrayaron que la medida de fuerza será suspendida una vez sea suscrito el entendimiento en la cartera laboral.
Según fuentes sindicales, el acuerdo supone la reincorporación de los 337 trabajadores despedidos en los últimos días, un aumento inmediato de entre 400 y 450 pesos (entre 115 y 130 euros) y la apertura de una ronda de negociaciones por un plazo de 90 días.
Pablo Biro, secretario general de la APLA, remarcó que la medida de fuerza, que el viernes entró en su noveno día, será suspendida una vez se firme el entendimiento en la sede del Ministerio de Trabajo.
La decisión fue adoptada en sendas asambleas de los sindicatos, después de que Julio Scaramella, portavoz de Aerolíneas Argentinas, anunciara un preacuerdo con los 2.000 trabajadores en conflicto.
A este entendimiento preliminar se llegó en horas de la madrugada del vierne en una reunión en la sede del Gobierno argentino en la que participaron el jefe del gabinete, Alberto Fernández; el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, representantes de APLA y APTA y Gerardo Díaz, que asumió las negociaciones en reemplazo del presidente de Aerolíneas, Antonio Mata.
La medida de fuerza, que comenzó el 24 de noviembre pasado, ha originado la cancelación de más de 300 vuelos, afectó a más de 50.000 pasajeros y ocasionó pérdidas a la línea aérea por unos 10 millones de dólares.
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