Suspendido indefinidamente el tren a Machu Picchu debido a amenazas

La empresa británica PerúRail, que opera el servicio de tren a la ciudadela inca de Machu Picchu, en el sudeste de Perú, anunció ayer la suspensión indefinida del servicio ante la amenaza de acciones violentas en su contra. Según un comunicado publicado en la prensa local, la empresa "se ve en la imperiosa necesidad de suspender hasta nuevo aviso el servicio de trenes de Cuzco a Machu Picchu". La medida obedece a que una empresa privada perteneciente a pobladores de la zona, la cual no obtuvo autorización para operar un servicio de trenes, instó a las comunidades campesinas del Cuzco a tomar los vagones de PerúRail. La acción ha sido convocada para hoy, y ha recibido el rechazo de las empresas de turismo que operan en la región, según manifestó Carlos Canales, presidente de la Cámara Nacional de Turismo, en declaraciones a la emisora Cadena Peruana de Noticias (CPN). Canales anunció que denunciarán a la empresa Ferrocarril Santuario Inca Machu Picchu por apología de la violencia. PerúRail explicó que la suspensión del servicio "se toma en salvaguarda de la seguridad y los intereses" de los pasajeros, que ascienden a unos 2.000 diarios en esta época del año. Asimismo, la compañía británica anunció que está negociando con las agencias de viajes para cambiar las fechas de los desplazamientos programados a ese destino turístico o proceder a devolver el dinero a los pasajeros que han adquirido ya los billetes.