Se levanta la huelga de Alitalia y deberá ejecutar el plan de reestructuración

"Nosotros hemos dado nuestro acuerdo a este plan y debe ser ejecutado por que, de lo contrario, el derecho comunitario no tendría sentido", dijo Barrot. El comisario declinó valorar los argumentos de los sindicatos de la compañía, pero recalcó que el plan constituye "una verdadera oportunidad" para la supervivencia de Alitalia. El plan de reestructuración, que pretende superar la delicada situación financiera de la aerolínea de bandera italiana, fue aprobado con condiciones por la Comisión en junio de 2005. Incluye un aumento de capital por más de mil millones de euros; la reducción de la participación del Estado en su accionariado del 62 a menos del 50 %; la división de la compañía en dos sociedades y el recorte de al menos 3.000 puestos de trabajo. Los sindicatos italianos del transporte decidieron ayer, poner fin a las movilizaciones "extremas" contra el plan industrial de Alitalia, que en los últimos días han provocado la cancelación de cientos de vuelos, tras una reunión con el Gobierno. El Ejecutivo decidió convocar el 1 de febrero una reunión a tres bandas -gobierno, empresa y sindicatos- que, según anunció el ministro de Agricultura, Gianni Alemanno, servirá para intentar lograr un acuerdo sobre el desarrollo del plan industrial, respetando los compromisos asumidos. Los trabajadores de Alitalia, en especial los de mantenimiento, realizan asambleas y protestas desde hace una semana, que se han traducido en la suspensión de cientos de vuelos diarios: ayer se anularon 188 en el aeropuerto de Roma-Fiumicino. Los empleados han rechazado el proyecto al considerar que la dirección es incapaz de reflotar la empresa y pretende convertirla en una compañía aérea de bajo coste, al tiempo que han denunciado las condiciones laborales, que tachan de "insostenibles".