La precipitación al aprobar la Ley Antitabaco estatal puede acarrear problemas a los negocios de restauración y al sector turístico en general. Es una de las conclusiones a las que se llegó ayer en la tertulia que HOSTELTUR TV ofrece cada miércoles en el Canal 4 de Mallorca, dedicada, en esta ocasión, a analizar el impacto de la citada norma en estas empresas.
Cuatro voces autorizadas en el tema aportaron su visión: Bertomeu Jaume, coordinador de drogodependencias de la Consejería de Salud; José García, de la Federación de Hostelería de UGT Baleares; Francisco Martínez, vicepresidente de la Asociación de Restauración de Mallorca, y Pedro Vidal, vicepresidente de la Asociación Española de Salas de Fiesta.
Jaume se apresuró a aclarar que, ante la confrontación de la normativa balear y la estatal, la Administración autonómica apuesta por el cumplimiento de la nacional por tratarse de una norma "amplia, básica y de obligado cumplimiento". No obstante, el coordinador balear de drogodependencias criticó la falta de consenso con que el Ejecutivo central aprobó la Ley.
Vidal y Martínez coincidieron con Jaume al valorar la labor de consenso del Gobierno balear en la elaboración de la norma autonómica, que lleva en vigor desde julio de 2005. El propio Martínez participó en la mesa de negociación que se constituyó en las islas para prever los efectos de la Ley en los diferentes sectores. En este mismo sentido, Vidal aclaró que todo el mundo está de acuerdo con los objetivos de la norma nacional, pero no con las formas, ya que "es más prohibitiva que preventiva".
Una ventaja para los destinos competidores
La Ley estatal establece que los establecimientos de más de 100 m2 deberán separar físicamente los espacios en los que esté permitido fumar, habilitando un sistema independiente de ventilación. Todos los invitados al debate coincidieron en afirmar que los ocho meses que la normativa permite para adaptar las instalaciones son insuficientes, al no tener en cuenta la proximidad de la temporada alta.
Asimismo, los representantes empresariales aseguraron que el carácter restrictivo del texto legal choca con la propia esencia del sector turístico, dedicado a vender ocio. "El turista viene a pasárselo bien, no a que le prohíban", aseguró Martínez, quien añadió que la mayoría de destinos que suponen competencia para el archipiélago balear no tiene esta desventaja.
Por su parte, García, representante sindical, quiso desdramatizar la situación aclarando que el empresariado lleva mucho tiempo restringiendo la posibilidad de fumar tanto a trabajadores como a clientes.
El sector repuntó en 2005, según Gonzalo Pascual
El programa de anoche, también ofreció una entrevista con Gonzalo Pascual, copresidente de Marsans y presidente de la Comisión de Turismo de la CEOE. Ante las cámaras de HOSTELTUR TV, Pascual analizó la marcha del ejercicio 2005 en el sector turístico español y aseguró que ha supuesto un pequeño repunte que puede poner fin a la crisis que se venía arrastrando durante los últimos años.
En referencia a la reciente adquisición de Mundicolor por parte de Marsans, aclaró que la integración de sus compañías no es vertical y que cada una debe competir en el mercado por sí misma.
Pascual añadió que la reconversión que necesita el destino balear es responsabilidad de las propias empresas, ya que "es obligación del empresario prever el futuro y adelantarse a los cambios". Respecto a este tema, se mostró reacio ante la idea de la reconversión a través del turismo residencial porque, en su opinión, no es bueno mezclar especulación inmobiliaria y turismo.
Ante la pregunta acerca del desfase en la contabilidad de Spanair, Pascual dijo que se trata de errores contables debido a las diferencias entre los sistemas escandinavo y español y negó que esto haya repercutido negativamente en las relaciones con sus socios de SAS.
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