El secretario de Estado de Industria, Turismo y Comercio, Pedro Mejía, ha defendido ayer en Shanghai que el turismo cultural y educacional "en particular" pueden ser una fuente muy importante de cooperación entre España y China.
Mejía, que presentó las conclusiones del panel de turismo del III Foro Hispano-Chino, destacó que España, "como segunda potencia mundial turística", puede colaborar en el desarrollo de "este sector en China", que tiene grandes perspectivas de crecimiento futuro en el turismo internacional.
Para el secretario de Estado, estas perspectivas de colaboración hacen que China y España "puedan ser socios estratégicos en la exploración de inversiones por parte de las empresas de ambos países" aprovechando cada uno las experiencias del otro.
Mejía hizo hincapié en la importancia que tiene la política de agilización de los trámites de obtención de visados para favorecer los viajes hacia uno y otro destino, sobre todo en programas de intercambio entre alumnos de ambos países, ante "hechos tan importantes" como el "Año de España en China", previsto para 2007, o la anunciada creación de un Instituto de Confucio en la Universidad Autónoma de Madrid.
Por otra parte, el secretario de Estado expresó su deseo de "una mayor colaboración entre las líneas aéreas y las agencias de viajes, porque pueden tener un papel decisivo en las relaciones entre China y España, y ser este último país una puerta a Europa y un puente a América Latina".
En 2004, China movió 109 millones de visitantes, en su mayor parte chinos de Hong Kong, Macao y Taiwán, y un número de turistas extranjeros de 16,9 millones, con unas salidas al exterior de 28,8 millones de viajeros, de los que más de la mitad se movieron por las zonas geográficas próximas.
La Organización Mundial de Turismo (OMT) considera en sus estudios de futuro que China será un mercado emisor de turistas muy importante, "presumiblemente el primero del mundo", con unos 100 millones de turistas en el año 2020.
Respecto a España, la Secretaría de Estado no tiene unas cifras concretas y las previsiones son de unos 36.000 turistas españoles que visitaron China en el 2005, y unos 20.000 chinos que llegaron a España para turismo ese mismo año.
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