La ministra de Integración danesa, Rikke Hvilshoej, ha denunciado a las aerolíneas escandinavas SAS ante la policía por violar la Ley de Extranjería, ya que utiliza azafatas chinas sin permiso de residencia danés en sus vuelos diarios entre Copenhague y Pekín.
"Tenemos reglas especiales en relación con los aviones y barcos registrados en Dinamarca que entran y salen de territorio danés, y esas reglas exigen, a nuestro parecer, un permiso de residencia", declaró ayer Hvilshoej.
La ministra de Integración no ha tenido en cuenta la argumentación de SAS de que también ha usado una práctica similar desde 1958 con su personal japonés en los vuelos hacia o desde Japón, sin que hubiera ninguna reacción de las autoridades danesas, lo que hizo que incluyera este caso en la denuncia.
El consorcio escandinavo, propietario de la española Spanair, instó al Gobierno a "modernizar" sus reglas de acuerdo con las prácticas actuales en el mundo de la aviación, una opción que la ministra no descartó estudiar. La policía investigará ahora el caso y la posibilidad de multar a SAS.
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