La aerolínea británica British Airways (BA) podría demandar a la gestora BAA, recientemente adquirida por el grupo español Ferrovial, por daños y perjuicios derivados de su supuesta mala gestión del caos aeroportuario generado a partir del pasado jueves, cuando la Policía anunció que había desarticulado un plan terrorista para hacer estallar en pleno vuelo aviones con rumbo a Estados Unidos.
En declaraciones a Daily Mirror, el director de la compañía aérea, Willie Walsh, aseguró que "desde el 11-S, todo el sector sabe que puede haber momentos en los que serán necesarias más medidas de seguridad". "Sin embargo, a la hora de la verdad, BAA no tenía un plan para mantener el aeropuerto [de Heathrow] funcionando adecuadamente", añadió. Según el directivo, el operador, que gestiona los aeropuertos londinenses de Heathrow, Gatwick y Stansted, entre otros, no tenía personal suficiente para efectuar los registros, lo que causó colas interminables y obligó a la cancelación de vuelos.
La situación se agravó el lunes, al decidir BAA que hasta ayer no aplicaría en Heathrow y Gatwick las nuevas medidas de seguridad, más flexibles, sancionadas por el Gobierno después de rebajar el nivel de alerta terrorista de "crítico" a "grave". Argumentó que necesitaba un día para instruir al personal sobre las nuevas directrices, que vuelven a permitir el equipaje de mano a bordo y reducen los registros personales al 50%.
Flexibilización de las medidas
Los aeropuertos británicos recuperaron ayer una cierta normalidad al volver a permitirse el equipaje de mano a bordo y reducirse los registros personales en un 50%, lo que contribuyó a reducir las filas de espera. Hasta próximo aviso, los pasajeros que vuelen desde el Reino Unido podrán embarcar una única bolsa de mano -de 45 centímetros de largo por 35 centímetros de ancho y 16 de alto- y no estará permitido ningún tipo de líquido, excepto fármacos con receta indispensables para el vuelo y leche infantil. También estarán prohibidos los geles, aerosoles y pastas, lo que significa que los pasajeros ya no podrán llevar productos de aseo como desodorante, espuma de afeitar o pasta de dientes.
Respecto al agua mineral, aunque los viajeros no podrán pasar botellines por el control de seguridad, sí podrán comprarlos en las tiendas aeroportuarias y posteriormente subirlos a bordo, excepto si viajan a Estados Unidos. Sí estarán permitidos equipos electrónicos como ordenadores portátiles y teléfonos móviles.
Pese a que la situación ha mejorado mucho desde el jueves pasado, continúan las cancelaciones y retrasos en los principales aeródromos del país. BAA ha advertido de que los viajeros deben comprobar los detalles de su vuelo antes de desplazarse y llegar al aeropuerto con dos o tres horas de antelación.
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