La suspensión de pagos de la agencia de viajes francesa Elegance, llevó a la aerolínea turca de vuelos charter Atlas Jet a suspender desde mediados de agosto los vuelos programados. Como consecuencia de ello, alrededor de 3.000 turistas franceses se encuentran varados en Turquía.
El mayor inconveniente es que los turistas no tienen quien se haga responsable por la situación, ya que la agencia contratada se declaró en quiebra. Además, según el diario francés Libération, la reglamentación actual en Francia no prevé ningún amparo para los consumidores en caso de fallo del turoperador o del transporte. Tampoco se contemplan sanciones a ciertas mayoristas que "con el fin de ahorrar dinero" contratan proveedores poco fiables.
El pasado lunes la administración pública y el sector privado francés mantuvieron una reunión para discutir sobre la necesidad de crear una regulación que proteja a los consumidores.
Por su parte, el dueño de la agencia francesa Nouvelles Frontières, Jacques Maillot ha sugerido elaborar en el país una lista negra en la que se incluyan las "malas" agencias de viajes. Esta idea no ha caído en saco roto, ya que la dirección de turismo considera que es una sugerencia que merece ser estudiada.
Sección Agencias (agencies@hosteltur.com)
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