El gerente de la Asociación de Balnearios de Galicia, Benigno Antonio Amor Barreiro, declaró a los periodistas que los balnearios gallegos "lideran el sector termal de toda la Península Ibérica" y, como muestra, indicó que en 2005 100.000 termalistas usaron estas instalaciones.
Amor incidió en la evolución del sector en Galicia para explicar su éxito actual y señaló que en los años 90 las instalaciones balnearias hicieron reformas y mejoraron la cualificación de sus trabajadores. "Si a esto sumamos el recurso básico que ya tenemos y que es el agua, obtenemos como resultado los 1.200 puestos de trabajo actuales del sector gallego", explicó y añadió que el "interés del sector es todavía mayor, ya que dinamiza la actividad económica de la comarca en la que se instalan y a esto también contribuye el hecho de que todas las aguas explotadas en Galicia tienen Declaración de Utilidad Pública, es decir, tienen interés termal y minero-medicinal reconocido, por lo que el usuario nunca tendrá confusión con otras ofertas".
Según el gerente del colectivo, la reivindicación más antigua del sector es que sus tratamientos "se incluyan en los ofrecidos por la Seguridad Social, como ocurre en Portugal, Alemania o Francia, ya que a las utilidades tradicionales para tratar problemas respiratorios, digestivos o reumatológicos se le suma ahora su uso en terapias antiestrés, antitabaco y adelgazantes", subrayó.
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