El Ejecutivo luso destinará unos 380 millones de euros en los próximos cuatro años a aumentar la capacidad del aeropuerto de Portela, en las afueras de Lisboa, según anunció ayer el ministro de Obras Públicas y Transportes, Mario Lino.
Lino dijo que el crecimiento del tráfico aéreo en el aeropuerto, calculado en cerca del 4% en el año 2000, será de más del 9% en este ejercicio. También reconoció que las obras podrán crear "algunas dificultades y afectar la calidad de los servicios".
Por su parte, el presidente de Aeropuertos y Navegación Aérea de Portugal (ANA), Antonio Guilhermino Rodrigues, informó de que la ampliación comenzará en enero y con ella se prevén aumentar los actuales 10 millones de pasajeros por año a 16 millones en 2010.
Esta iniciativa permitirá aumentar los movimientos de pista de 36 a 40 por hora, la capacidad de estacionamiento de los aviones de 51 a 64 lugares, y se podrán además gestionar 4.320 pasajeros por hora, frente a los actuales 3.200, dijo Rodrigues.
El pasado 11 de julio, el ministro Lino indicó que se invertirían 400 millones en la ampliación del aeropuerto de Lisboa, para asegurar el tráfico aéreo en la capital lusa hasta la apertura de las instalaciones del nuevo aeropuerto de Ota. Estas futuras instalaciones, que están previstas para 2016 y cuyas obras tendrán un valor de 3.000 millones de euros, estarán situadas en la localidad de Ota, a unos 40 kilómetros al norte de la capital.
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