El turismo de negocios que atraerá el nuevo Palacio de Congresos de Palma de Mallorca, emblema de la remodelación de su fachada marítima, planteará nuevas exigencias a la ciudad, que deberá potenciar también toda su oferta cultural, comercial y de ocio.
Los invitados de anoche en HOSTELTUR TV estuvieron de acuerdo en que la ubicación del Palacio de Congresos es la mejor de las que se barajaron en el pasado, y en que, una vez en marcha, supondrá un revulsivo no sólo parta el turismo de congresos sino para toda la oferta de la ciudad en su conjunto.
El teniente de alcalde de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma, Javier Rodrigo de Santos señaló que lo más importante es que este ingente proyecto, en el que se lleva trabajando desde 2003, no tiene marcha atrás. El único obstáculo en el camino lo representan lo que calificó de "intereses oscuros", por parte de aquellos que se niegan a dejar avanzar el proyecto.
Por su parte, Marilena Jover, gerente del Palacio de Congresos, señaló que el edificio será un revulsivo para que la ciudad se ponga en marcha junto a todo el sector. Está demostrado, añadió, que "los palacios que funcionan bien son aquellos en los que se vuelca la ciudad". Una implicación que atañe a lo público y lo privado para hacer frente a una demanda general de mayor calidad. Un aspecto que considera prioritario Marilén Pol, presidenta de la Asociación Hotelera de Palma, quien encuentra preciso "evitar el turismo que deteriora el destino".
La repercusión sobre los habitantes de la ciudad, y en concreto sobre la zona de levante, se materializará en una mejora de su fisonomía y de todos sus servicios. Así lo afirmó la presidenta de la Federación de Entidades Vecinales (FEPAE), Sol Sarabia, quien aseguró que una vez esté terminado el palacio todas las administraciones tendrán que "ponerse a trabajar para estar a la altura".
Ángeles Vargas (actualidad@hosteltur.com)
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