El grupo ruso AirBridge se hará con el control de la línea aérea estatal húngara, Malév, una vez que haya sido privatizada, según informó la página web de la Entidad Estatal de Privatizaciones de Hungría (APV).
La dirección de APV decidió que en la última ronda de negociaciones sobre la venta de Malév participará únicamente el grupo ruso AirBridge, propiedad del magnate ruso Román Abramovich. La entidad subrayó en su informe que la firma de compraventa podrá ser firmada "sólo después de finalizar las negociaciones con los representantes de los trabajadores de Malév".
Debido a que la APV trata como secreto toda la información relacionada con la privatización de la línea aérea magiar, pocos conocen los planes de Abramovich, pero sí, según el diario "Népszabadság", que el industrial ruso quiere convertir a Malév en un puente aéreo entre Rusia y los destinos más importantes de Europa. Para ello contará con la colaboración de la alianza de aerolíneas rusa AirUnion, presidida por Abramovich e integrada por seis compañías de ese país. Malév se integrará, desde esta primavera en la alianza Oneworld, compuesta, entre otros por Iberia, British Airways y American Airlines, señala el diario.
La empresa ya fue privatizada parcialmente en 1992, cuando el Estado húngaro vendió su 35% a la compañía italiana Alitalia y otro 5% a la sociedad de inversiones Simest, pero en 1999 el Estado recompró la empresa.
La aerolínea transportó el pasado año a más de tres millones de pasajeros y, según datos preliminares, cerró el año con un déficit de 58 millones de euros.
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