Aeroméxico invertirá 310 millones de dólares (225,9 millones de euros) en renovar su flota, cantidad que se destinará a la adquisición de dos nuevos Boeing 787 Dreamliner, de nueva generación, informó Andrés Conesa, director general de la aerolínea.
Sin embargo, la empresa determinó no quedarse con las naves y obtenarlas mediante arrendamiento "para evitar un desembolso importante", precisó Conesa en declaraciones que cita el diario local Excelsior y agregó que "tenemos hoy el compromiso de cinco aviones B787, con un costo de 155 millones de dólares (112,9 millones de euros), según Boeing; tres con un arrendador y los otros dos están a nombre de Aeroméxico".
Para Conesa, la industria aérea mexicana navega entre fuertes turbulencias derivadas de excesos de capacidad y tarifas castigadas que generan pérdidas de dinero para todas las empresas. "No hay espacio para tantas líneas aéreas", destacó y añadió que a pesar de que en 2007 se han observado mejores niveles de ocupación, las tarifas son "absurdamente bajas, más castigadas que en 2006, por lo que todo el mundo está perdiendo dinero".
Conesa reconoció que esa situación ha afectado los resultados de Aeroméxico, "la única empresa que rinde cuentas, por lo que no es verdad que haya quienes sí estén ganando dinero. Hay que ver los factores de ocupación, analizar las tarifas y compararlas con los costos de operación. Incluso las aerolíneas más eficientes del mundo, ni con sus costos de operación están haciendo dinero", enfatizó.
HOSTELTUR (latinoamerica@hosteltur.com)
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