La mitad de los ejecutivos de grandes firmas en Brasil creen que volar en este país es más peligroso que en el resto de América Latina, según una encuesta elaborada por la Cámara Americana de Comercio e Industria (Amcham).
La encuesta, realizada entre el 30 de julio y el 2 de agosto, mostró además que las empresas han modificado su rutina debido a la crisis en el transporte aéreo que se mantiene desde hace casi un año en Brasil.
El 50% de los encuestados considera que el sistema brasileño es menos seguro al de los demás países de América Latina, frente al 41% que cree que es igualmente confiable, señala la encuesta de Amcham. El 94% cree que la crisis de la aviación civil del país perjudica a sus negocios en algún grado, mientras que para el 48% los problemas del transporte aéreo brasileño llegaron a entorpecer "mucho" los negocios, mientras que el 46% dijo que la crisis afectó "poco" las actividades.
Debido a "los últimos acontecimientos en el sector", las empresas han disminuido los viajes aéreos de sus empleados, según el 81% de los entrevistados.
Los serios problemas de la aviación brasileña tuvieron su punto máximo el 17 de julio pasado, cuando murieron 199 personas en un avión de la aerolínea local TAM que se estrelló en el aeropuerto Congonhas, de Sao Paulo, tras una fallida maniobra de aterrizaje.
Tras ese accidente, el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva despidió al ministro de Defensa, Waldir Pires, quien era blanco de duras críticas de la prensa y la oposición política desde que el 19 de septiembre de 2006 el accidente de un avión de la aerolínea Gol dejó 154 muertos, y tomó, además, la decisión de descongestionar el aeropuerto de Congonhas.
Sobre estas decisiones, el 55% de los encuestados considera que la elección del magistrado Nelson Jobim como sustituto de Pires "tal vez" fue una decisión acertada. Para el 45% de los entrevistados, "la mejor decisión" para Congonhas ha sido dividir conexiones y escalas con aeropuertos de otros estados. El 41 % opinó que es mejor limitar el uso y la transferencia de algunos vuelos para los aeropuertos paulistas de Guarulhos y Viracopos, otra de las decisiones y anunciadas por el gobierno.
Para el 54% sería positivo abrir a empresas extranjeras el mercado interno brasileño de vuelos nacionales, puesto que con ello aumentaría la competencia en el sector.
El 64% de los participantes en la encuesta opina que los problemas del sector aéreo brasileño fueron provocados por la politización y mala gestión de los organismos responsables. Para la mayoría de los afectados, el 51 %, el gobierno federal ahora se muestra dispuesto a resolver los problemas del sector, aunque hasta ahora ha hecho muy poco.
HOSTELTUR (latinoamerica@hosteltur.com)
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