La cadena hotelera Accor presentó ayer en su hotel Wanda Beijing la nueva estrategia mundial para convertir sus hoteles de gama alta Sofitel en hoteles de lujo de aquí a 2010. Dentro de los cambios, la marca abarcará dos nuevas enseñas, Sofitel Legend, para los establecimientos de estilo más tradicional, y Sofitel So, dirigida a los consumidores más jóvenes y con un toque más moderno.
Para hacer rentable el cambio, Sofitel se convertirá además en una unidad de negocio independiente dentro de Accor, cambiará el sol dorado de su logotipo por dos letras "o" entrelazadas que simbolizan la unión y basará su nueva imagen corporativa en el "toque francés". El director general de Sofitel, Yann Caillère, explicó que en el sector del lujo "necesitas algún tipo de patrimonio", por lo que la nueva estrategia se basará en "nuestros orígenes franceses, en la riqueza y la vitalidad del lujo francés", aunque precisó que "no con arrogancia sino con elegancia".
Siete hoteles de la cadena se renovarán para adoptar la marca Legend a partir del próximo año, mientras que Caillère prevé abrir su primer So en París a finales de 2009. El directivo de Sofitel también señaló que la cadena espera contar con 140 hoteles para 2010, aunque su objetivo a medio plazo es llegar a los 250.
Accor cuenta con 3.800 hoteles distribuidos por 90 países y planea una inversión de 2.500 millones de euros en los próximos cuatro años, de los que 600 millones se invertirán en China.
El Wanda Beijing es el primero de Sofitel que ha dado el salto desde la gama alta, mercado tradicional de la marca, a la de lujo, segmento en el que el grupo francés se adentra por primera vez, según explicó el presidente ejecutivo de la compañía, Gilles Pélisson.
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