Al turismo de negocios por el golf

Dicho estudio, titulado "El golf cotiza en Bolsa", realiza un curioso análisis sobre el comportamiento de las acciones de las empresas cotizadas en el Mercado Continuo en función de si sus directivos practican o no golf. Una de sus principales conclusiones es que las acciones de aquéllas empresas en las que sus directivos son aficionados a este deporte se han revalorizado un 45,2% desde el 31 de diciembre de 2005 hasta el pasado 30 de septiembre. Es el caso de 62 empresas sobre un total 131 compañías cotizadas en el Mercado Continuo. En cambio, el valor de las 69 empresas cotizadas en las que no consta esta afición ha crecido con menor vigor en el mismo período: 28,9%. El presidente de la Cámara de Comercio de Madrid puso de relieve el hecho de que si la región se ha constituido en "polo de atracción" para el llamado turismo de golf, ello se debe a que "en los últimos años la Comunidad de Madrid ha sido una de las que ha concentrado el mayor número de instalaciones óptimas para la práctica de este deporte". Gracias a los 27 campos de golf, Madrid es la tercera región española con mayor número de instalaciones, después de Andalucía y Catalunya. Del coto de caza al hoyo de golf El cambio de la afición deportiva por antonomasia de los hombres de empresa, la caza, por el golf encuentra un gran estímulo en la fortaleza de la demanda de los turistas extranjeros. El buen clima y las inversiones de los hoteles para dotarse de buenas instalaciones animan ya a 2,5 millones de golfistas extranjeros a pasar en España sus vacaciones en un hotel, como mínimo de cuatro estrellas, para recorrerse 18 hoyos cada día. No escatiman en gastar hasta 340 euros diarios, lo que supone cuatro veces más que el gasto promedio de los 58,5 millones de turistas extranjeros que visitaron España el año pasado. De ahí que el turismo relacionado con el golf proporcione unos ingresos anuales de 1.280 millones de euros. Son viajeros que suelen alojarse en hoteles de cuatro y cinco estrellas, por lo que del gasto diario de 340 euros, dedican entre 120 y 180 euros al alojamiento, la comida, las compras y otros servicios complementarios, como el alquiler de coches y la asistencia a espectáculos. Lo más interesante es que estos viajeros alargan su estancia entre siete y nueve días si son extranjeros, mientras que la estancia media del turista de golf español también excede la media del turista vacional, de tres a cinco días. Santos Campano señaló que existen otras ventajas añadidas para fomentar este turismo en la Comunidad de Madrid, entre las que destacan su virtud para desestacionalizar la demanda (ya que se practica fundamentalmente entre octubre y abril) y sus beneficios para la conservación de entornos verdes alrededor de los campos de golf. HOSTELTUR (actualidad@hosteltur.com)