La constructora Mota-Engil ha manifestado su interés en adquirir el 50,1% del capital de Grounforce Portugal que controla el grupo español Globalia, según ha informado el presidente de TAP, Fernando Pinto.
El directivo, cuya compañía detenta el restante 49,9% de Grounforce Portugal, afirmó que "Mota-Engil siempre estuvo interesada en el negocio", aunque aseguró que hay otras dos empresas extranjeras interesadas en participar en el proceso.
Pinto reconoció que la iniciativa de Globalia de poner en venta su participación puso fin a "un matrimonio con muchos problemas de comunicación que no resultó".
El choque entre ambos socios se produjo porque Globalia pretendía reforzar la presencia internacional de Grounforce, una opción que según analistas portugueses chocó con la prioridad de TAP de mejorar la calidad del servicio prestada en el aeropuerto lisboeta de Portela. Luego los dos accionistas se enfrentaron a la hora de elegir el sustituto del administrador de la empresa, Angelo Esteves, un cargo que recayó, finalmente, en Timoteo Gonçalves, ejecutivo proveniente de Halcón Viajes.
La falta de entendimiento en la dirección de la compañía repercutió en las relaciones con los trabajadores, que llevaron a cabo dos protestas en los últimos meses.
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