El grupo español Marsans decide retirarse de la puja por la aerolínea de SAS ante el giro que está tomando el proceso de venta de la compañía y los acuerdos a los que parece estar llegando el grupo escandinavo, sin tener en cuenta a los que fueron sus socios por tantos años, según han asegurado a HOSTELTUR fuentes del sector.
La corporación española presidida por Gonzalo Pascual explica en un comunicado difundido ayer por la empresa que los últimos acontecimientos alrededor de la aerolínea española, el entorno del mercado y la estrategia que siguen, "aconsejan tomar un nuevo rumbo para nuestro grupo en el que consideramos que hoy ya no es conveniente incorporar a la actual Spanair".
Afirman que intentaron su adquisición, ya que podría ocupar un "puesto relevante" en los planes de futuro del grupo. "De ahí nuestro interés en presentar una oferta competitiva". Sin embargo, según apuntaron a este diario las mismas fuentes, tras Marsans anunciar la venta de su participación del 5,1% y su intención de hacer una oferta por el 100% de la compañía, la iniciativa del grupo SAS de subastar Spanair y luego contactar a otros empresarios españoles "les cayó como un jarro de agua fría".
Spanair cerró 2007 con pérdidas de unos 31 millones de euros, generados sobre todo por los resultados del cuarto semestre, según explicó SAS al presentar los resultados anuales del grupo, atribuyéndolos a la feroz competencia en el mercado doméstico español y el alto coste del combustible. La operadora española del grupo escandinavo además tiene deudas por más de 200 millones de euros.
Tras la solicitud de información de otra operadoras europeas sin llegar a materializarse en un interés real, el proceso ha dado un giro en las últimas semanas hacia Iberia, en cuyo Consejo de Administración no parece haber acuerdo en torno a esta negociación, así como hacia Air Nostrum.
Diana Ramón Vilarasau (transportes@hosteltur.com)
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