A pesar de los últimos incidentes registrados en Lhasa, la capital del Tíbet, la región sigue estando abierta al turismo, de hecho, según informaciones aparecidas en diversos medios extranjeros, los vuelos a la capital siguen llevándose a cabo con total normalidad, sin embargo, la mayoría de monasterios permanecen cerrados al público.
Aún así el Gobierno regional ha suspendido la entrega de la documentación necesaria a turistas extranjeros para poder viajar a la región himalaya, mientras, las autoridades chinas han recomendado a los visitantes que abandonen Tíbet en los próximos días.
Desde la embajada de España en Pekín han confirmado que la situación en Lhasa "está bajo control" y por el momento no se plantea pedir a los turistas españoles que no viajen a la región, algo que según han señalado desde la Embajada "no va a hacer ningún país de la Unión Europea".
España colabora en las negociaciones
Desde que comenzaron los disturbios el Ministerio de Asuntos Exteriores, a través de su ministro Miguel Ángel Moratinos, se ha mantenido en contacto con la colonia española en la provincia y participa en las negociaciones que se desarrollan en Bruselas con el fin de lograr una respuesta unitaria de la Unión Europea ante el conflicto en Lhasa.
Xisca Muñoz (actualidad@hosteltur.com)
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