Los representantes de los trabajadores y la dirección de Spanair ratificaron el viernes el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de la aerolínea, que previsiblemente se comenzará a aplicar a mediados de diciembre.
Así lo ha explicado el presidente de todos los comités de empresa de la compañía, Jordi Mauri, quien ha cifrado en entre 850 y 900 los trabajadores que se despedirán -de los 1.200 contemplados en un principio- y en entre 700 y 800 los que serán trasladados.
El presidente ha indicado que Spanair deberá ahora presentar el ERE a la Dirección General de Trabajo, algo que hará a finales de la próxima semana o comienzos de la siguiente, tras el periodo de consultas a los trabajadores.
Las cifras de despidos y traslados no son por ello definitivas, ya que, según ha apostillado, los trabajadores podrán decidir ahora si adherirse voluntariamente al ERE con la rescisión de contrato, las prejubilación o el traslado.
Una vez cerrado este período de siete días, la dirección elaborará un listado definitivo con nombres y apellidos de todos los que se hayan sumado voluntariamente al ERE y éste, junto con el documento acordado, será remitido a Fomento.
Mauri prevé que el ERE se comience a aplicar a partir del 15 de diciembre. En el caso de algunos colectivos, como los de oficinas, se tardará "hasta un año" en hacer efectivos todos los despidos, ha explicado, y los traslados se llevarán a cavo entre diciembre y abril de 2009.
El presidente de los comités ha calificado el acuerdo como "aceptable" ya que, si bien ha destacado que en las negociaciones se ha conseguido reducir el número de despidos, ahora hay que aplicarlo y esto es "lo más difícil a nivel humano".
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