La Comisión Europea ha ordenado al Gobierno italiano recuperar los 300 millones de euros que otorgó a Alitalia en condición de préstamo, considerando que trata de una ayuda estatal ilegal, de acuerdo con la legislación europea. Al mismo tiempo, ha aprobado por otra parte el plan de privatización de la compañía aérea.
En una declaración oficial, la Comisión expresa que la venta de los activos de Alitalia al consorcio Compañía Aérea Italiana (CAI) no constituye una ayuda estatal, "siempre que las autoridades italianas cumplan plenamente con los compromisos a los que han llegado".
Estos incluyen la garantía de que la venta se lleve a cabo en condiciones de mercado. Con este fin, el proceso será supervisado por una comisión de seguimiento, designada por el administrador. Si la CE no está satisfecha con cualquier aspecto del procedimiento, se volverá a abrir el caso. Se trata de una solución similar a la aplicada en los casos de la liquidación de Sabena y, más recientemente, de Olympic Airlines.
Si bien permite la venta de los activos, la Comisión dictaminó que el préstamo puente de 300 millones desde el Gobierno italiano a Alitalia en abril de este año fue "una ayuda ilegal e incompatible con el mercado común». Alitalia ya había recibido ayudas de salvamento y reestructuración en el pasado y, en consecuencia, Italia debe tomar las medidas necesarias para recuperar los 300 millones de la aerolínea.
Antonio Tajani, vicepresidente de la Comisión responsable de Transportes, ha manifestado que "con el administrador especial, Fantozzi, debe empezar a vender los activos de la compañía aérea antes de su liquidación". La Comisión está vigilando este procedimiento y la garantía de que las transacciones se harán a precios de mercado. "Con estas decisiones, estoy convencido de que un nuevo y más dinámico mercado del transporte aéreo se desarrollará en Italia. Este proceso dará lugar a la aparición de una línea aérea privada, de menor tamaño pero más eficiente. En casos anteriores, incluso muy recientes, he visto que las compañías aéreas no sólo puede recuperarse y prosperar, sino también competir con éxito en interés de los pasajeros y de la industria aérea, lo cual es esencial para la competencia en Europa".
La CAI planea adquirir parte de la flota de Alitalia, junto con sus franjas horarias, las rutas y marca, y fusionarlos con la compañía italiana antes rival Air One.
De propiedad privada, Air One está dirigida por Carlo Toto, uno de los integrantes del consorcio de 17 inversores, que incluyen también presidente de Piaggio Roberto Colaninno, ex asesor del Banco Intesa Sanpaolo Alitalia, y la familia Benetton.
Diana Ramón Vilarasau (transportes@hosteltur.com)
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