La compañía india Kingfisher, propiedad del millonario Vijay Mallya, ha anunciado al Gobierno español su intención de abrir "de forma inmediata" una ruta directa, sin escalas, entre India y Barcelona, la primera que uniría ese país con España.
La información trascendió tras la reunión celebrada a puerta cerrada en el hotel Taj Mahal de Bombay entre empresarios indios y altos representantes del Gobierno español.
Kingfisher es una de las principales aerolíneas privadas del país, junto a Jet Airways. Según informaron fuentes gubernamentales, la compañía no ha decidido desde cuál de los aeropuertos indios operará la rutam, Bombay o Nueva Delhi, si bien han confirmado que el destino en España será la capital catalana.
La existencia de una conexión directa entre España e India facilitaría las relaciones comerciales entre los dos países, uno de los objetivos del viaje realizado por el grupo español encabezado por la vicepresidenta María Teresa Fernández De la Vega.
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