Abren el concurso de acreedores de Air Comet, que se queda sin oferta de compra

La compañía ha presentado ante el juez titular, Francisco de Borja Villena, un activo de 84,5 millones de euros frente a un pasivo de 310,4 millones de euros. Sin embargo, el órgano judicial informa en un comunicado de que el activo exacto no se puede calcular, ya que está integrado principalmente pos bienes intangibles. De la deuda total de 310 millones de euros, cerca de 160 millones son deudas con empresas del mismo grupo.
  
El juez ha nombrado como administradores concursales de la compañía al economista y auditor Luis Arqued Alsina, al abogado Mariano Hernández Montes y a la Agencia Tributaria, que deberá designar a su representante.
  
El órgano judicial calcula que aproximadamente existen unos 24.000 afectados (equivalentes a 45.000 trayectos vendidos dejados de realizar) y 740 trabajadores que, en estos momentos, tienen su relación laboral con la compañía suspendida por el ERE aprobado el pasado mes de enero, que no tuvo carácter de extintivo de los contratos.
  
Los acreedores de la compañía contarán con un plazo de un mes, desde la publicación de la declaración de concurso en el Boletín Oficial del Estado (BOE), para comunicar sus deudas al juzgado. La administración concursal incluirá la lista definitiva de los acreedores en el informe patrimonial de la compañía.
 
El juez pide más información a los propietarios
 
En el auto, el juez solicita a Air Comet más información sobre el estado de sus cuentas y advierte a sus propietarios, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, de que si no cumplen este requerimiento "se entenderá que la concursada incurre en falta al deber de colaboración, con cuantas consecuencias de ellos se deriven, civiles y penales".
  
En tal sentido, el juez reclama a la compañía una relación de los alquileres de inmuebles que mantiene, el pago de las rentas y la declaración de todas las operaciones de venta de inmuebles realizadas en los dos últimos años. Asimismo, una relación de las posibles condonaciones de deudas realizadas a la compañía en los dos últimos años, la posible constitución de garantías nuevas a favor de los acreedores, así como una relación jurada de deudas satisfechas con anterioridad a su vencimiento.
  
Air Comet deberá también informar al juzgado sobre si realizaba algún tipo de actividad sin contar con el aseguramiento que le exigía la ley y presentar toda la documentación sobre los salarios de los trabajadores pendientes de pago, las mensualidades y la cuantía total. Por último, el juez ha solicitado a Díaz Ferrán y Pascual que informen a la administración concursal si existe "cualquier acción de responsabilidad societaria ejercitada contra ellos por terceros" en el plazo de tres días.
 
Información de contacto  
 
Los acreedores de Air Comet podrán ponerse en contacto con los administradores concursales por correo ordinario a la dirección: 'Administración concursal del concurso de Air Comet', Paseo de la Castellana número 60, 5º, 28046 Madrid, mediante el fax 917810841 o a través del correo electrónico info@concursoaircomet.com.
  
Además, en los próximos días y durante la tramitación del concurso la información se podrá consultar en la página web www.concursoaircomet.com.
  
Air Comet presentó el pasado 24 de marzo su petición de concurso de acreedores voluntario, después de que la compañía fracasara en su intento de negociar el pago de la deuda, acogiéndose al artículo 5.3 de la Ley Concursal que le otorgó un plazo de tres meses para tratar de evitar la insolvencia.

Retiran la oferta de compra

El grupo Batallajuanola, representante del fondo luxemburgués Real Estate Distressed Fund, ha decidido retirar su oferta de compra de Air Comet, propiedad de los empresarios Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual.

La decisión se ha tomado tras una reunión celebrada ayer en horas de la tarde, a la vista de la deuda anunciada en el concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos), declarado por el Juzgado de lo Mercantil número 8 de Madrid.

Según el auto de dicho juzgado, la aerolínea acumula una deuda de 310 millones de euros, que incluyen los importes adeudados a empresas del grupo (150 millones de euros, según la compañía) que Marsans ya había avisado a Batallajuanola que daba por perdidos. El grupo catalán, que representaba supuestamente a un fondo luxemburgués, había supeditado siempre su oferta de compra definitiva por la aerolínea del Grupo Marsans al estado de sus cuentas, por lo que su intención era comprobar en la auditoría cuál era su realidad financiera y su deuda.

En cualquier caso, uno de los dueños de la aerolínea, Gonzalo Pascual, destacó la ausencia de contacto directo durante las negociaciones con los representantes del grupo catalán, lo que les hizo dudar de sus verdaderas intenciones. De hecho, buena parte del sector turístico dudó desde un primer momento del interés real de BatallaJuanola por Air Comet, notificado un día después de que la aerolínea presentara el concurso voluntario de acreedores.

Desde entonces, Air Comet y la empresa dedicada a reflotar compañías en crisis, que decía actuar en nombre de Real Estate Distressed Fund, se reunieron a contrarreloj para cerrar una posible operación, en la que Marsans no terminó de confiar nunca. De hecho, la urgencia por cerrar la transacción que mostró en un principio el grupo dirigido por Joan Batalla, que prometía hacerse cargo de toda la deuda, se vio limitada pronto por la necesidad de un estudio pausado que exige cualquier compraventa de relevancia.

Air Comet se vio obligada, el 21 de diciembre pasado a cerrar por la inmovilización de su flota por orden de un juez británico. El pasado 15 de marzo, el Ministerio de Fomento le retiró la licencia de operador y el pasado 12 de abril, repartió sus derechos de vuelo entre España y Latinoamérica entre Iberia, Air Europa e Iberworld.

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