Tres de cada cuatro empresarios baleares creen que no se mantendrán los puestos de trabajo actuales

No obstante, el 87% de los empresarios turísticos de las islas creen que esta temporada turística será similar a la de 2009 y solo el 4,6% cree que será peor, lo que supone una reducción del pesimismo que había el pasado año en el sector, cuando casi el 30 por ciento creía que iba a ser peor.

Las islas más optimistas de cara a esta nueva temporada son Ibiza y Formentera, donde el 9,5% de los empresarios consultados por la Fundación Gadeso confían en que los resultados serán mejores que el año pasado, frente al 8% de mallorquines y el 6% de menorquines, que son los más pesimistas para este 2010.

Gadeso destaca que la incertidumbre está instalada entre el empresariado por diversas causas entre las que figuran factores exógenos como la crisis económica, las medidas del Gobierno central para reducir déficit o la evolución de las cenizas volcánicas.

Como factores endógenos, el análisis de Gadeso apunta el hecho de que una "parte significativa" de la oferta es "repetitiva y obsoleta" y recuerda que es "urgente" hacer un producto turístico más competitivo.

Por sectores de actividad

Los hoteles convencionales son los que tienen perspectivas más altas (el 14,3% de los hoteleros creen que será una temporada mejor que la anterior); seguidos de los apartamentos turísticos (12%) y los del turismo residencial (11,5%). Los más pesimistas son los que ostentan establecimientos de turismo rural (9,3%).

Desde la oferta complementaria las perspectivas no son tan halagüeñas como en la de alojamiento y aquí solo el 4,7 por ciento cree que este año la temporada será mejor, frente al 90 por ciento que considera que será igual y el 5,3 por ciento que calcula que los resultados serán peores.

Mallorca y Menorca son las islas más pesimistas en este apartado del sector turístico.

La restauración es la que muestra más esperanzas y en el lado contrario se sitúan el comercio turístico y el transporte, mientras que el ocio continúa en la media.

La estacionalidad se agrava

Uno de los problemas que observan los empresarios turísticos de Balears en el sector, según Gadeso, es la estacionalidad que en lugar de paliarse se ha radicalizado, pasando cada vez a temporadas más cortas.

Como debilidades de la actividad turística, el 85% del empresariado ha apuntado la estacionalidad; el 75% la escasa competitividad del producto; el 33,5% la excesiva ocupación del territorio, y el 28,3% el trabajo de baja calidad.

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