La idea errónea que tenemos de innovación hotelera
15 enero, 2015 (12:20:56)Foto perteneciente a Janaka Dharmasena - Stockvault
Cuando hablamos de innovación en turismo y más concretamente en hoteles, mucha gente empieza a pensar en un hotel lleno de tablets, recepcionistas con Google Glasses, máquinas para check-ins/outs automáticos, robots consignas y habitaciones del futuro. Y es que últimamente, debido al gran desarrollo tecnológico, se tiende a confundir innovación con aplicaciones tecnológicas aplicadas al trabajo.
Cuando buscamos “Innovar” en la Real Academia de la Lengua, la definición que leemos es “Mudar o alterar algo, introduciendo novedades”, lo cual no implica nada sobre robots o widgets. No. Habla sobre introducir novedades y es aquí donde mucha gente se equivoca.
Innovar implica cambiar procesos, mejorar técnicas, aunar fuerzas… sin que por ello eso implique implantar un programa informático que cueste millones. Crear una sencilla reunión semanal en el departamento comercial para comentar actividades realizadas y temas a futuro puede mejorar mucho su coordinación; bajarse una herramienta con la que gestionar varias redes sociales puede optimizar el tiempo dirigido a su gestión; realizar un curso de ofimática podría ahorrar cientos de horas al departamento de informática, si los propios trabajadores pudieran solventar los pequeños problemas diarios que acaban ocupando tanto tiempo al help desk.
Lo bueno de todo esto es que cualquier persona puede sugerirlo y no suele suponer ni altos costes ni difíciles formaciones para dominar herramientas. Son ideas que nos pueden hacer nuestras horas en la oficina más productivas y eficientes. Si además también conseguimos innovar en que la gente esté más a gusto (políticas de conciliación laboral, horarios flexibles, hilo musical en la oficina), esto también repercutirá en la productividad y el buen hacer de los trabajos realizados.
Así que en vez de innovar en tecnología de altos costes que en lugar de mejorar los procesos los complican, pensemos en pequeños y sencillos cambios que hagan que nuestro hotel sea más efectivo y esto se vea reflejado en el servicio que damos a nuestros clientes.
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