Un año después del comienzo de la pandemia COVID-19 seguimos conviviendo con este virus que todavía guarda muchas incógnitas. Sin duda uno de los sectores que más impacto ha experimentado ha sido el turismo.
El principal reto que se nos planteaba durante los primeros meses consistía en cómo adaptar los hoteles y convertirlos en espacios seguros. Junto con la cadena RIU Hotels & Resorts, con quien compartimos una estrecha relación, teníamos claro que había que actuar muy rápido. En prácticamente dos meses, Marzo y Abril 2020, desarrollamos 17 exitosos protocolos y formación para operar un hotel en tiempos de COVID-19. Todos ellos se plasmaron en un manual que posteriormente ha sido empleado por muchas más empresas y organizaciones profesionales, convirtiéndose en un referente.
El sector turístico no pierde la esperanza de poder arrancar con fuerza la temporada de verano que se acerca y eso mismo pienso personalmente, aunque haya algunos factores que no dependan estrictamente del propio sector. En esta ocasión contamos con un factor diferenciador muy importante frente al año pasado: la vacunación, la experiencia y un mayor conocimiento científico. Ahora encaramos la temporada sabiendo que los protocolos han funcionado con éxito, han convivido con el día a día del hotel y continúan garantizando el máximo nivel de seguridad. ¿Y por qué seguimos hablando de protocolos? La respuesta es clara: los seguimos necesitando y han demostrado que con ellos las incidencias son mínimas. Son claves para el turismo y la seguridad en los hoteles debido a que todavía pasará un tiempo hasta que se consiga la inmunización suficiente de la población, tanto en destinos turísticos como en países emisores. Hay que tener en cuenta que los destinos turísticos son lugares donde se concentran temporalmente personas de muy distintas procedencias y que por lo tanto hay que tomar estrictas medidas para impedir la transmisión del virus.
Seguimos cautelosos y observando de cerca el proceso de vacunación que todavía no garantiza la vuelta a la normalidad.
Echo la vista atrás y recuerdo que viajé a Leeds para reunirme con uno de los principales operadores turísticos, planificando programas de vigilancia en destinos. Esto era en enero de 2020 y empezaba a ver información de lo que sucedía en Wuhan, pero reconozco que en aquellos días todavía no nos hacíamos a la idea de lo que se nos venía encima. Nunca nos habíamos enfrentado a una situación de tal magnitud, era algo desconocido, a pesar de que contamos con una amplia experiencia en seguridad y salud pública en el sector turístico.
Teníamos que desarrollar soluciones en tiempo record para proteger el turismo. Para ello, la colaboración con RIU Hotels & Resorts fue clave en sus inicios. Fue un reto que nos obligó a estar permanentemente actualizados en cuanto a información científica que iba llegando, sobretodo entendiendo los mecanismos de transmisión que a su vez nos permitían diseñar las estrategias preventivas y de control. Además, también debíamos estar al día de posibles actualizaciones en normativas y situación sanitaria de una veintena de países. En todos los casos siempre hemos apostado por el nivel más alto a la hora de escoger productos y normas, con el doble objetivo de garantizar la máxima seguridad en los diferentes países y destinos turísticos. Quiero aprovechar para hacer una mención especial al Departamento de Seguridad y Salud de RIU Hotels & Resorts, quien aportó un importante punto de vista técnico y conocimiento en lo referente a seguridad y salud en hoteles. Por otra parte, también quiero destacar las contribuciones de los gerentes y directores de los distintos departamentos operativos. Ellos hicieron viables y compatibles las recomendaciones técnicas con un servicio al cliente satisfactorio y seguro. El resultado fue un trabajo en equipo desde el que surgieron estos 17 protocolos dirigidos a garantizar espacios seguros, tanto para los turistas que nos visitan como para los trabajadores del sector, y que han sido utilizados por muchos otras organizaciones en numerosos destinos. Actualmente continúan en constante revisión y actualización.
Un total de 80 hoteles RIU alrededor de todo el mundo ya han obtenido el Hygiene Response Certificate. Además, todos los hoteles de la cadena siguen el programa Preverisk(in), basado en una vigilancia intensa y continua, que engloba todas las áreas de seguridad y salud, y especialmente la revisión de los procedimientos operativos Covid. Es la respuesta más completa y exigente a las necesidades del sector. Todo el conocimiento adquirido fue posteriormente compartido con el resto del sector, haciendo que más de cien empresas y grupos turísticos estén actualmente adheridos a esta iniciativa.
Baleares no renuncia a la temporada de verano y esto viene avalado con los buenos resultados observados tras la implementación de las medidas preventivas en 2020. Seguiremos muy pendientes de los avances de la vacunación tanto en origen como en destino, que aunque está aportando buenos indicadores, no hay que olvidarse de que no es el único factor que hará que el turismo se reactive de la forma más exitosa posible.
Los programas preventivos seguirán siendo esenciales.
Dr Esteban Delgado. Presidente y director técnico Preverisk Group. Doctor en biología. Experto en salud pública y turismo. Miembro de la Academy of Experts de Londres, de la Royal Society of Public Health del Reino Unido, y Royal Society of Medicine de Londres. Ha participado en varias consultas de la OMS y de la OMT, así como asesor de ABTA desde 2008.
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