¿Una paella puede compartir mesa con 3 religiones diferentes?
17 marzo, 2017 (02:12:27)En las clases que imparto sobre Gastronomía, en los estudios de Grado en Turismo de la Escuela Universitaria Formatic Barcelona, analizamos tanto la historia de la evolución de la misma como los elementos antropológicos que se desprenden de las diferentes civilizaciones y culturas, así como la aplicación que se podria derivar en las hotelería y la restauración. En este artículo de opinión uno de mis alumnos Toni Espadas Navarro analiza los elementos a tener en cuenta, en la organización de un evento popular inclusivo, deseo que sea de vuestro interés y valoréis las particularidades y necesidades de los diferentes perfiles de clientes en vuestros negocios.
En plena era de la globalización e interculturalidad (excluyendo a Donald Trump por anomalía), las religiones han debido de convivir con diferentes ideologías religiosas durante décadas. Era de esperar que dentro de un marco geográfico como es el caso de Catalunya, donde la principal actividad económica impulsadora sea el turismo, se pueda dar lugar a un debate en cuanto a un turista y un residente impongan su cultura en su zona de confort y, por ende, deriven a un choque inter-cultural. Así bien, la temática de esta presente quisiera dar un enfoque más interactivo y alegórico en relación al turismo y la gastronomía que pueda verse afectado en una zona determinada conviviendo con diferentes doctrinas (cristianismo, islamismo y judaísmo).
La ciudad de Girona, como escenario principal, es reconocida por la presencia notable del barrio judío dentro de un vecindario mayormente cristiano quienes han convivido pacíficamente durante siglos. ¿Alguna vez os habéis preguntado que, en una ciudad mayormente turística, si se celebrara una gran paella popular para los distintos residentes del municipio y se presentaran cristianos, islámicos y judíos, cómo podría divergirse dicho evento? ¿Podría incluso celebrarse? ¿Alguna vez se ha tenido en cuenta la diversidad existente en nuestra sociedad?
A continuación nos pondremos en el lugar de unos supuestos organizadores de esta paella popular teniendo en cuenta la imperante diversidad social: Es sabido que el cerdo y el alcohol están vetados en el Islamismo, de ahí, el primer paso que podría inferir a una gastronomía tolerada por las religiones mencionadas, el arroz se debería cocinar sin ningún tipo de bebida alcohólica, ni tampoco cerdo, ni derivados de animales que han muerto de forma natural o que contenga sangre. De modo que, como solución, la paella podría contener derivados de animales como la liebre, conejo, siempre y cuando estén dotado por Halal[1]. ¡Cuidado! ¡El judío no lo toleraría! siguiendo el criterio de la Torá[2], que permite el consumo de animales terrestres que tengan pezuñas hendidas y rumien, su lista de alimentos prohibidos comprende el cerdo, conejos, liebres, ardillas, caballos, etc. Curiosamente, el Judaísmo incluye muchas más restricciones que las demás.
La gastronomía de un país es la identidad del mismo. Si bien, en Catalunya, debido a pertenecer a la zona costera del Mediterráneo se dota por una dieta enriquecida de gran variedad saludable de cualquier tipo, tanto en proteínas como en verduras y hortalizas. Por lo que, se podría sugerir una paella de marisco para poner fin a esta envergadura… ¡error! Por lo que concierne a pescados y mariscos, la Torá no acepta todo tipo de marisco (entiéndase gambas, langostinos, moluscos, cangrejos, calamares, pulpo, etc.), tan solo aquellos seres marinos con escamas y branquias.
Finalmente, llegados a este punto, solo cabe pensar en servir una poco dotada paella vegetariana. En las tres religiones estarían de acuerdo en que se podría servir, pero el cristiano posiblemente (a excepción de veganos) estará desconforme que una paella sin carne, o derivado de ello, no es una paella tradicional, y más si el evento se realiza un domingo. ¿Entonces, qué? Existe una curiosidad en el Torá que dicta que el pollo, el pato, el ganso y el pavo están permitidos puesto que son animales del nuevo mundo y no aparece explícitamente alguna prohibición al respecto en las escrituras. Hecha la ley, hecha la trampa. Definitivamente la paella podría contener pollo, confiado por Halal, disfrutando de la compañía de las tres religiones compartiendo en su gusto común reunidos en un mismo punto sin entrar en discusión:
La gastronomía como nexo de unión y tolerancia intercultural.
El respeto, la convivencia y la empatía es el principio para un mejor entendimiento a la riqueza cultural porque la religión no debe ser un impedimento para conectar, más bien para encontrar nuestras semejanzas y disfrutar de ellas como en dicho ejemplo de la gastronomía mediterránea, en especial, con una deleitosa paella.
Si la asociación de vecinos de Rocafonda (Mataró) hubiera querido tener en cuenta que el 40% de los residentes eran musulmanes, no hubieran tenido problemas con la organización de la paella popular organizada y referenciada en esta notícia. Personalmente creo que se debiera extrapolar estas particularidades, no solo los idiomas, a los negocios hoteleros y extrahoteleros para casar la oferta y la demanda.
[1] Término utilizado para referirse a los alimentos aceptados según la Sharia y el Corán (Islam)
[2] Texto que contiene la ley y el patrimonio identitario del pueblo israelita.
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