Lanzarote sumerge las primeras esculturas del primer museo submarino de Europa
1 febrero, 2016 (12:56:08)Lanzarote sumerge las primeras esculturas del primer museo submarino de Europa
- La inmersión de las obras del escultor británico Jason deCaires en los fondos marinos de Lanzarote pone en marcha lo que será el primer museo submarino de Europa, que estará concluido en febrero de 2017, concebido para la preservación y conservación del medio marino
- Las obras sumergidas este domingo 31 de enero representan a figuras humanas inspiradas en los propios vecinos de la isla canaria de Lanzarote, para lo que han servido de molde
- En la línea de la conocida obra y visión del binomio arte-naturaleza del lanzaroteño César Manrique, se ha empleado en la creación de sus instalaciones materiales que no afectan al medio marino
- Las obras, concebidas “en defensa de los océanos”, serán visitables por buceadores de todos los niveles y servirán para incrementar la biomasa marina y facilitar la reproducción de las especies de la isla
- El conjunto escultórico de deCaires se sumerge este domingo, 31 de enero, a una profundidad de entre 12 y 15 metros en la bahía de Las Coloradas
Islas Canarias, 1 de febrero de 2016 – El primer museo submarino de Europa ha comenzado a convertirse en realidad este fin de semana con la inmersión de varios conjuntos escultóricos del artista internacional Jason deCaires Taylor en los fondos marinos de la Bahía de Las Coloradas de Lanzarote, accesible por buceadores y submarinistas de todos los niveles. El proyecto está ideado para, con el transcurso del tiempo, incrementar la biomasa marina y facilitar la reproducción de las especies de las Islas Canarias en un territorio declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
El proyecto forma parte del Museo Atlántico y creará un gran arrecife artificial formado por una serie de instalaciones artísticas elaboradas en hormigón de PH neutro y materiales que no afectan al fondo marino ni a la flora y fauna de la zona, ya que se ha evitado la utilización de metales y materiales corrosivos no sostenibles para el suelo submarino. Los conjuntos de esculturas, que ocupan el 15 por ciento de una superficie total de 2.500 metros cuadrados, recrean diferentes escenarios vitales a través de la representación de figuras humanas, para lo que han servido de inspiración y molde los propios residentes de la isla de Lanzarote en situaciones cotidianas que invitan a la reflexión junto a referencias a problemas humanitarios, como la crisis de los refugiados, o a la relación entre la naturaleza y el hombre.
El artista Jason deCaires Taylor, reconocido internacionalmente por sus creaciones escultóricas submarinas de los museos subacuáticos de Las Bahamas, Cancún y Las Antillas, proyecta en su obra “una defensa de los océanos” en un lugar concebido como museo para la preservación, conservación y educación del medio marino “como parte integral de un sistema de valores humanos”. En sus trabajos, deCaires pretende “poner de relieve la ligazón entre arte y naturaleza, pasado y presente, y trasladar cierto cuestionamiento crítico en torno a la mercantilización de los recursos naturales”. El Museo tendrá por escenario una isla, Lanzarote, que es ya un referente internacional del binomio arte-naturaleza gracias a la obra de artista lanzaroteño César Manrique.
Según la consejera de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, María Teresa Lorenzo, entidad promotora del proyecto junto a los Centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo Insular de Lanzarote, este enclave del municipio de Yaiza, el proyecto “va a constituir un gran atractivo turístico para toda Canarias, al ser el primer museo subacuático de Europa y porque es arte inmerso en la naturaleza y servirá de estímulo al segmento de turistas de buceo que cada año visitan las Islas Canarias”. Así, este museo subacuático se consolidará como un reclamo más “que diferencia la singular oferta turística canaria del resto de destinos competidores”. La consejera ha recordado que “un porcentaje de los ingresos que genere el museo se destinará a la investigación y divulgación de la riqueza de las especies y los fondos marinos de la Isla con el objetivo de poner en valor la plataforma submarina de Lanzarote”. La consejera resaltó además “el honor que supone contar con un artista de tanta relevancia como Jason deCaires y agradeció al escultor británico que haya elegido Lanzarote para crear el primer museo subacuático de Europa “por el amor al arte y la naturaleza que tiene esta tierra, una filosofía creada con gran acierto por el genial César Manrique”.
Por su parte, el presidente del Cabildo Insular de Lanzarote, Pedro San Ginés, resaltó que “el Museo Atlántico es un elemento de proyección mundial que trasciende cualquier barrera ideológica e idiomática, un proyecto que antes de nacer ya ha cumplido con uno de sus objetivos principales: la promoción internacional de la marca Lanzarote, tal y como prueba que medios de comunicación de todo el planeta, desde los Estados Unidos hasta la lejana Malasia, se hayan hecho eco del trabajo que ha desarrollado Jason deCaires Taylor en su taller del sur de la isla durante los dos últimos años”.
La primera inmersión artística del Museo Atlántico integra las siguientes instalaciones:
- El Rubicón: Agrupación de 35 figuras humanas que se encaminan hacia un mismo destino. Atraviesan el umbral de una puerta que ejerce como límite entre dos realidades y que se abre al Océano Atlántico. Los modelos utilizados para estas esculturas son personas de la isla.
- La Balsa de Lampedusa: Reflexión sobre la crisis humanitaria basada en la pintura de Gericáult. Ésta representa el abandono que sufrieron los marineros en su naufragio a Senegal. La escultura pretende trazar un paralelismo entre esta situación polémica con la crisis actual de los refugiados, donde muchos se ven abandonados por la sociedad y/o por falta de humanidad: una reflexión sobre la esperanza y la pérdida y, a su vez, un reconocimiento hacia aquellos que han perdido sus vidas en esa travesía. La forma del barco está inspirada en las pateras llegadas a Lanzarote.
- Los Jolateros: Una agrupación de niños en sus barquitas hechas con latón, denominadas “Jolateros”, que hace referencia a una tradición de Lanzarote y a su vez se convierte en metáfora de un posible futuro para nuestros niños, marcado por la precariedad que supondría navegar con una chapa.
- Contenido: Una pareja tomando un “selfie” invita a reflexionar sobre el uso de las nuevas tecnologías y la autorreferencialidad. Esta escultura se ubicará junto a La Balsa de Lampedusa de modo que la cámara elude un momento trágico, convirtiéndolo en acontecimiento “de fondo” digno de ser registrado. La cruda realidad de unos se convierte en espectáculo para otros.
- Las Esculturas Híbridas: Fusionan naturaleza y humanidad conviviendo en armonía a la vez que referencian la rica vegetación de Lanzarote. Estas esculturas son mitad humanas, mitad cactus, y constituyen una parte importante del jardín botánico.
- Los Fotógrafos: De forma similar a la pareja “selfie”, los fotógrafos abren un debate sobre el uso de las nuevas tecnologías y el voyerismo. El conjunto escultórico pretende poner de relieve la ligazón entre arte y naturaleza, pasado y presente, y trasladar cierto cuestionamiento crítico en torno a la mercantilización.