Ibiza: 2.200 viviendas sin legalizar
13 septiembre, 2012La Asociación Círculo Ibiza considera imprescindible que el Govern Balear resuelva los conflictos constitucionales que plantea la nueva Ley de Medidas Urgentes para la Ordenación Urbanística Sostenible, con el fin de que puedan aplicarse de manera inmediata algunos de sus puntos.
Así, según especificó Jordi Carreño, secretario de la entidad, “con esta Ley, podrían legalizarse las 2.200 viviendas que en la actualidad se encuentran en el limbo en la isla”.
La medida para normalizar la situación de un importante número de asentamientos alegales en medio rural se incluye en esta “mini Ley del Suelo”, que busca regularizar la multitud de urbanizaciones no concluidas, desclasificadas o con serios problemas con las infraestructuras y servicios que hay en la actualidad en Ibiza.
“El problema reside, entendemos, en que esta Ley no es realmente urgente, debido a las zancadillas que se le han puesto desde dentro de las islas y que le están poniendo desde fuera, ralentizando su aplicación”, expuso Carreño, quien recordó que, al parecer, dicho texto entra en conflicto con leyes estatales que no puede contradecir.
“Otra de las trabas que detectamos es que probablemente no pueda ser llevada a la práctica con celeridad por parte de los Ayuntamientos, a quienes les falta mucho recorrido para solucionar un problema que ellos mismos han ido creando durante estos últimos cuarenta años”, matizó.
Para el secretario de Círculo Ibiza la intención de esta Ley “es buena, ya que busca redefinir los conceptos básicos del suelo urbano, urbanizable y rústico, y prepararnos, a modo de antesala, para lo que será la futura Ley del Suelo de las Islas Baleares, actualmente en redacción y en consultas previas con los Ayuntamientos, y que esperamos ansiosos”, concretó.
El aspecto más novedoso, y que mayor repercusión va a tener sobre la isla de Ibiza, es el hecho de que contemple la creación de un nuevo concepto de tipología de suelo urbano que se denomina “ Asentamiento en el medio rural”, conforme a la Ley de Suelo estatal en vigor desde el año 2007.
“La terminología no es muy apropiada, porque da pie a confusión con los suelos rústicos en su esencia, ya que trata de ordenar un suelo urbano de especiales características, que sobre todo va a servir para regularizar la multitud de urbanizaciones no concluidas, desclasificadas o con problemas con las infraestructuras y servicios urbanos que hay en la actualidad en la isla de Ibiza”, añadió Juan Planells, socio de Círculo Ibiza.
“Acto seguido, suponemos, esta norma debería poner en orden las viviendas digamos “alegales que allí están ubicadas junto a las legales. Algo que sus propietarios anhelan como “agua llovida del cielo” tomando como ejemplo la Ley aprobada recientemente y en esta línea en la Comunidad de Andalucía”, matizó Planells.
Según expusieron Carreño y Planells, profesionales de la arquitectura , esta ley les otorga a los ayuntamientos la potestad de regular mediante la herramienta urbanística del Plan Especial, la multitud de núcleos de población “tangibles, visibles y que todos conocemos”, que se han generado de forma desordenada, al amparo de la concesión de licencias de obras, o sin ellas, en urbanizaciones no perfectamente reguladas urbanísticamente”, aseguraron.
“Se trata de una medida que consideramos fundamental y que sin duda podría calificarse como lo mejor de esta Ley. Si bien se podría haber habilitado mediante un proceso más corto y directo para resolver de forma verdaderamente urgente la legalización de las urbanizaciones o bien asentamientos deficientemente regulados por los ayuntamientos”, apuntó Jordi Carreño.
Para Círculo Ibiza esta ley va encaminada a resolver los problemas generados “por la histórica mala gestión urbanística de nuestras instituciones que han venido concediendo licencias de obras en suelos calificados como urbanos, pero que realmente no cumplían todos los requisitos urbanísticos establecidos por la Ley para que se pudiera haber iniciado el proceso de construcción de las viviendas”.
Según ambos “la casuística es enorme, porque normalmente se trata de zonas urbanas sin las dotaciones urbanísticas adecuadas, inacabadas o donde nunca se llegaron a completar los procesos de gestión urbanística”.
“Ahora son los propietarios de esas viviendas los que sufren la situación, ya que sus viviendas se encuentran en una situación de “limbo urbanístico” que es realmente complejo desbloquear, además de, indudablemente, tener que asumir los costes correspondientes de urbanización y dotación de servicios”, aseveraron desde la asociación.
Para el secretario de Círculo Ibiza “el mayor problema viene ahora, tras la entrada en vigor de esta nueva Ley tan esperada, ya que es cuando los ayuntamientos deben iniciar y provocar de forma inmediata la regularización, asimismo, de todos sus núcleos rurales o “asentamientos en el medio rural”, y dedicarles los medios necesarios para “enmendar la plana”a la mala gestión llevada a cabo en los últimos cuarenta años”.
Según agregó Juan Planells “ahora ya no tienen excusa alguna, ya que el Gobierno Balear les ha entregado la herramienta necesaria para llevar a cabo esta labor. Eso sí, tememos que otras administraciones no sepan cómo utilizarla o cómo interpretarla, y que, ante la tremenda labor a desarrollar, carezcan de valor político para afrontar algunas situaciones complicadas que a buen seguro se presentarán”.
Desde Círculo Ibiza apremiaron a las instituciones a resolver esta problemática “por el bien de los ciudadanos”.