Una nueva ley facilita los viajes "de aventura" a través de China
27 agosto, 2003China ha levantado ayer una ley que durante décadas prohibió comprar billetes de ida y vuelta para los trenes chinos, algo que va a beneficiar muy especialmente a los turistas "de mochila" y viajeros que recorren el país por su cuenta, sin mediación de agencias turísticas. La prohibición de comprar billetes de ida y vuelta en China, impuesta por los gobiernos locales chinos para obtener más beneficios, era uno de los mayores problemas que hoy en día presentaba un viaje en solitario por el país. Hasta ahora, la prohibición de comprar estos billetes causaba la absurda situación de que los turistas o viajeros, nada más llegar a su destino, lo primero que tenían que hacer era ponerse a la cola de la estación de llegada para adquirir el tíquet de vuelta, a veces teniendo que esperar varias horas. En muchas ocasiones -la mayoría, debido a la gran demanda que siempre existe- se encontraban con la desagradable sorpresa de que no había billetes para la fecha que habían programado, por lo que tenían que cambiar sus planes, su itinerario de vuelta o viajar en autobús o en avión. "En China es donde los viajes son realmente aventuras, porque uno sabe cuándo va, pero nunca cuándo va a poder regresar", se quejaba recientemente un turista neozelandés en la inmensa Estación del Oeste de Pekín, al encontrarse con la imposibilidad de comprar un billete de vuelta. En China, los trenes son el medio de comunicación más usado para viajar por el interior del país, dado que el transporte por carretera es mucho más lento y peligroso, con más de 100.000 muertos al año, y el aéreo es más caro. Además, los ferrocarriles chinos son extremadamente puntuales, y normalmente los largos viajes se pueden realizar por las noches en cómodos coches-cama (divididos en dos clases, la "cama dura" y la "cama blanda"). El cambio en la ley ha venido forzado por la competitividad que las líneas aéreas y de autobuses han introducido en el mercado de transportes chino, a medida que el país se ha ido desarrollando económicamente en las dos últimas décadas y ha aumentado el turismo nacional e internacional.