El Gobierno de Baleares enviará el viernes al Parlamento el proyecto de ley que abolirá la ecotasa
9 julio, 2003Punto y final. Tras más tres horas y media de reunión con todo el sector turístico balear, Jaume Matas anunció la muerte de la ecotasa. Matas explicó la fórmula de supresión del impuesto que creó el Pacte de Progrés: a través de un Proyecto de Ley con un artículo único y por procedimiento de urgencia. La medida se aprobará este viernes en el Consell de Govern. «Queremos recomponer el diálogo y el entendimiento entre todos», remarcó ayer Matas, flanqueado por los consellers de Turismo, Medio Ambiente y Economía y Hacienda. El president no quiere que se dilate más el tiempo. Como ya adelantó el conseller de Turismo, Joan Flaquer, a EL MUNDO / El Día de Baleares será en septiembre cuando se suprima la ecotasa. Octubre, como muy tarde. Matas tuvo un gran poder convocatoria en el maratoniano simposio de turismo celebrado ayer en el Consolat de Mar. Hasta 37 representantes del universo turístico de las Islas acudieron a la primera llamada del Govern: desde sindicalistas hasta empresarios de primer nivel como Miquel Fluxà o Sebastián Escarrer; Lorenzo Bravo (UGT) o la mismísima María Antònia Munar. La cita empezó ligeramente impuntual, a las 17.20 horas, y durante la reunión se produjeron continuas intervenciones de los asistentes. Muchos creyeron que se iban a limitar a escuchar las propuestas de Matas. Todos sabían que se iba a hablar de turismo o de las fórmulas que cabrían para su eliminación. Pero algunos, como la Federación Empresarial Hotelera, o el propio Fomento de Turismo, que fueron más allá y pidieron al Govern que la ecotasa se suprimiera ya, enseguida, mejor hoy que mañana. Sin embargo, Matas explicó a los medios de comunicación que todavía no era posible. «Es nuestra intención quitarla cuanto antes, pero nuestros servicios jurídicos nos lo desaconsejan», precisó Matas. En cualquier caso, el president mostró su intención de seguir insistiendo en buscar algún resquicio legal para intentar eliminar la ecotasa este mismo verano. De todos modos, Matas no se mostró muy optimista respecto a esta posibilidad. Pero lo que sí anunció Matas fue la creación de un fondo de inversión medioambiental en el que cabrían la iniciativa pública y privada. Este fondo, que precisó con meridiana claridad que no sustituirá en ningún caso a la ecotasa, se nutriría de las aportaciones de todas las instituciones de Baleares. También del Gobierno Central y de la Unión Europea. Matas también resaltó que en el año 2003 se preveían recaudar 6.988 millones de pesetas con los fondos de la ecotasa, frente a los 4.000 millones de pesetas que se recaudaron en 2002. Esta cantidad que el Govern del Pacte de Progrés planteaba recaudar con la ecotasa será sensiblemente inferior cuando se formalice la supresión del impuesto que nació en mayo de 2002 y que morirá muy pronto. El presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pere Cañellas, calificó la reunión del sector turístico de «muy positiva». Cañellas explicó que «las posturas tomadas estaban muy claras desde un principio». Y añadió: «Este primer contacto ha sido fundamental para poder recuperar la industria del turismo en las Islas». Por su parte, el presidente del Fomento de Turismo de Mallorca, Miquel Vicens, declaró que «tenemos que trabajar juntos para poder volver a donde estábamos antes». También tildó de «muy agradable» el intercambio de impresiones que se produjo durante la reunión. Asimismo, el responsable del Fomento de Turismo de Mallorca se congratuló de la actitud mostrada por los representantes sindicales que participaron en el simposio convocado ayer por Matas. «Los sindicatos están abiertos y muy colaboradores. Todos coincidimos en la importancia que estos temas tienen para arreglar esta situación», resaltó Miquel Vicens. En general, todos los reunidos aye en el Consolat celebraron la recuperación del diálogo y el fin de los insultos y la crispación entre Govern y hoteleros. De otro lado, Josep Oliver, presidente de Caeb, remarcó que la creación de «buenas campañas publicitarias, para impulsar la seguridad y la limpieza serán trascendentales y abundarán en en toda la actividad económica de las Islas». Los sindicatos no se quedaron tan contentos como los empresarios turísticos de las Islas. José Benedicto, secretario general de CCOO, lamentó que el president Matas pusiera el RIP a la ecotasa. «Se va a quebar un modelo turístico de desarrollo sostenible. Ahora todo irá en beneficio de unos pocos empresarios y en contra de los trabajadores». En la misma línea, Lorenzo Bravo, secretario general de UGT de Baleares, resaltó que «ahora se iba a producir una degradación del territorio. Por otra parte, el sindicato USO y la organización ecologista GOB protestaron por no haber sido invitados a la reunión del Consolat. El president del Govern, Jaume Matas, adelantó la constitución de dos grupos de trabajo en el seno del Instituto Balear del Turismo (Ibatur) para promocionar el destino de las Islas. De esta manera, el primer grupo lo constituyen los mercados tradicionales (España, Alemania y Reino Unido) y el segundo los emergentes (básicamente los países del Este). Asimsimo, avanzó la creación de un tercer grupo que impulsará un plan de desestacionalización. Además, el presidente del Govern, Jaume Matas, avanzó que el conseller de Turismo, Joan Flaquer, viajará próximamente a los principales mercados emisores para difundir la derogación del impuesto. La cita más inmediata, como anunció a EL MUNDO / El Día de Baleares, será a finales de julio, en Hannover, en un encuentro internacional del turoperador Tui. Allí, Flaquer venderá las excelencias de Baleares. (A.R./S.V.R., diario El Mundo-El Día de Baleares, 09/07/03)