Entrena a tu hotel para la maratón
28 febrero, 2018 (11:29:51)¿Qué puede hacer un hotel por un corredor de la maratón?
Muchos establecimientos empiezan a formularse esta pregunta al observar a miles de deportistas de diferentes ciudades llenar los hoteles, coincidiendo con las pruebas más emblemáticas que se celebran en España. Es el caso, por ejemplo, de la maratón de Barcelona (11 de marzo), la cuarta más multitudinaria de Europa, tras Berlín, Londres y Paris, con más de 20.000 inscritos el pasado año, pero también de la maratón de Madrid (22 de abril), que congrega a 15.000 atletas (más casi otros tantos que corren la media maratón) o de la maratón de Valencia (2 de diciembre), que reúne a 18.000 corredores.
“Muchas pruebas deportivas representan una oportunidad de negocio para conseguir ocupaciones altas en los hoteles y fidelizar a un tipo de cliente muy específico, cada vez más numeroso”, indica Anna Burnat, asesora de Healthia Certification, el primer sello de alimentación saludable creado para el sector hotelero.
El consejo de esta dietista-nutricionista que ha desarrollado su labor profesional en empresas alimentarias de Barcelona, Buenos Aires y Nueva York, es que los hoteles sean sensibles a las necesidades de los deportistas aficionados que viajan a estas pruebas y pongan en marcha servicios complementarios para que repitan en años posteriores.
He aquí algunas ideas de Burnat:
Adaptar la oferta gastronómica a los requerimientos nutricionales de los maratonianos. Correr 42 kilómetros y 195 metros exige cuidar al detalle la alimentación, antes, durante y después de la prueba. “Durante los tres días anteriores a la prueba, el objetivo de cualquier maratoniano es hacer una carga de glucógeno muscular para acumular energía. Esto implica que la dieta ha de ser rica en alimentos que aporten hidratos de carbono, con un aporte moderado de proteína y bajo en grasa”, recalca Burnat. Al respecto, las cocciones preferidas de los maratonianos durante su estancia en el hotel son vapor, papillote, plancha y hervido, pero no así las frituras. En cuanto a las salsas, el consejo es servirlas aparte o que sean suaves para que cada deportista decida qué uso quiere hacer de ellas. Por su parte, las carnes más apropiadas para un corredor de la maratón son las magras (pollo, pavo, pescado blanco, etc.) También es buena idea elaborar muchos acompañamientos a base de alimentos ricos en hidratos de carbono: purés de patata, pasta, cuscús, ensaladas de arroz, legumbres... Otra cosa que agradecen los maratonianos son los caldos vegetales pues, además de hidratar, aportan una dosis extra de carbohidratos en caso de incluir fideos, por poner un ejemplo.
Amenities. Puede ser buena idea dar una vuelta de tuerca a los tradicionales productos de acogida que el hotel pone a disposición del huésped durante su estancia y dejar en las habitaciones un cuenco de frutos secos variados (almendras, avellanas, nueces, anacardos, etc.) o de fruta desecada (orejones de albaricoque, higos secos, ciruelas pasas, dátiles, etc.), además de plátanos frescos.
Pasta Party. En las maratones de Nueva York, Barcelona, Lisboa, Amsterdam o Sevilla es habitual que el día previo a la maratón se organice una pasta party para que los corredores socialicen entre ellos y se conozcan al calor de una buena fuente de hidratos de carbono (arroz, pan, pasta, patatas...) Puede ser muy buena idea que el hotel anuncie su propia pasta party y ofrezca un bufet con diferentes posibilidades: pasta con espinacas y pasas o macaroni, turkey sauce & marinara (como ha ofrecido en alguna edición la Maratón de Nueva York) o platos de arroz, como la maratón de Valencia.
Breakfast Run. El día de la prueba los maratonianos suelen desayunar dos horas y media antes de la competición, como mínimo. Si la hora de inicio de la maratón está fijada a las 8.30 de la mañana, como suele ser habitual en España, el bufet del hotel ha de estar abierto a las 6 de la madrugada, como muy tarde. En cuanto al contenido, es bueno saber que los maratonianos prefieren zumos que no sean ácidos (por ejemplo, de manzana o pera), así como muchos tipos de panes (excepto el negro y los que contienen mucha fibra): de pita, tostadas, etc. En cambio, muchos maratonianos evitan los lácteos, por lo que se aconseja incluir en el bufet un surtido de bebidas vegetales (avena, almendra, soja, etc.). Asimismo, agradecen la fruta cocida y, en concreto, las manzanas al horno o el membrillo (una de las mejores frutas para el corredor, en tanto suministra hidratos de carbono de rápida absorción). En cuanto al acompañamiento del pan, ofrecer quesos frescos, pavo o jamón cocido puede resultar acertado. Tampoco deben faltar mermeladas y cereales para el desayuno.
Visitas guiadas a la maratón. Algunos hoteles neoyorkinos ofrecen a los corredores un mapa con el recorrido de la maratón, jalonado con algunos enclaves turísticos de interés que quedan cerca del recorrido, para que los participantes puedan desplazarse los días previos al circuito a supervisar el trazado y, ya de paso, realizar visitas turísticas por los alrededores (organizadas por el propio hotel), en compañía de sus familiares. Otra sugerencia es poner a disposición de los clientes del hotel que llevan pensado participar en la maratón un minibus que traslade a los maratonianos hasta la línea de salida, así como que se ocupe de su recogida a la conclusión en función de un horario escalonado.
Masajes. Oxigenar los músculos y facilitar la eliminación de toxinas es clave para recuperarse bien a posteriori de un esfuerzo tan exigente. Algunos hoteles de referencia de los maratonianos se refuerzan durante estos días con masajistas deportivos que aceleran la recuperación muscular. Inmediatamente después de cruzar la línea de meta, lo que necesita un corredor es un masaje superficial que ayude a relajar la musculatura del tren inferior e impulse el retorno de la circulación sanguínea (los masajes profundos, en cambio, están desaconsejados hasta transcurridas 48 o 72 horas).
Batidos cinco estrellas. Un detalle que los maratonianos agradecen es que el hotel ofrezca batidos que aceleren la recuperación. Según Burnat, es imprescindible conocer que deben estar elaborados, aproximadamente, con un 75% de hidratos de carbono y un 25% por proteínas. Uno de los propuestos por Healthia Certification contiene, por ejemplo, mango, compota de manzana, leche desnatada y queso quark también desnatado.
Late Check Out. Permitir dejar más tarde la habitación respecto al horario habitual, es una gentileza que los corredores valoran, aunque en su mayor parte pernocten el día de la prueba en el hotel. Poder abandonar la habitación a las dos del mediodía, a las cuatro de la tarde, incluso a las seis, es una excelente estrategia promocional.
Ganar medalla. “Garantizar la satisfacción del cliente y fidelizarlo, es la principal recompensa que reciben los hoteles que se esfuerzan por correr también la maratón”, estima Anna Burnat, consejera de Healthia Certification. Al respecto, algunos sitios web ofrecen listados con los mejores hoteles para la Maratón de New York, tras haber sido calificados por quienes se han hospedado en ellos durante esta carrera.