Lisboa, un ‘city-break’ perfecto para el puente de octubre
La localidad portuguesa es un destino cercano y asequible para los españoles, lo que la convierte en una opción ideal que tener en cuenta para una escapada de fin de semana largo 7 octubre, 2020 (12:30:21)El otoño está a la vuelta de la esquina, pero las ganas de viajar siguen estando presentes para gran parte de los españoles, sobre todo cuando se trata de un destino cercano, seguro y que siempre tiene cosas nuevas que ofrecer.
El próximo mes de octubre nos regala un puente de tres días, ideal para un ‘city-break’. A la Lisboa se puede llegar en coche, tren, autobús o avión de forma fácil y económica. Además, ofrece rincones mágicos, y aventuras inolvidables gracias a la gran diversidad de atracciones turísticas y la combinación de cultura, gastronomía local e historia milenaria que combina la zona. Una opción que considerar, más teniendo en cuenta el contexto actual en el que la improvisación de última hora y los “chollos” dominan el nuevo ecosistema viajero.
La ciudad de Lisboa y sus barrios
En 2019, el certamen World Travel Awards, nominó a la ciudad de Lisboa como el principal destino mundial para un ‘city-break’. Y no es de extrañar, ya que la región lusa ofrece una simbiosis perfecta entre naturaleza y mar, patrimonio e historia, y disfrutar de su gastronomía tradicional. Si decides visitarla durante el puente del 12 de octubre, descubre un itinerario para aprovechar el destino y no perderte ningún ‘must’.
El primer día, dedícalo a conocer el centro de la capital portuguesa. Adéntrate en sus calles y recórrelas en el popular tranvía o a pie paseando por la orilla del río Tajo. Una visita imprescindible de la ciudad es el corazón del centro histórico: La Baixa. Una zona delimitada por los barrios de Alfama y el Chiado, cuyo eje principal es la Rua Augusta, una calle que te lleva hasta la conocida Plaza del Comercio, uno de los rincones más populares de la ciudad. El barrio de Alfama, al este de La Baixa, es el barrio más antiguo de Lisboa y en él se encuentran puntos históricos como las ruinas del Castelo de Sao Jorge, y, además, cuenta con una importante tradición de fado, callejones auténticos y mercadillos locales. Otra parada a añadir en el itinerario es la zona de Chiado, muy vinculada con la cultura y bohemia local donde se encuentran librerías y cafés con tradición literaria a la que se puede acceder paseando por las calles en cuesta o por el turístico Elevador de Santa Justa. Para terminar el día, déjate caer por el Barrio Alto, una zona característica por sus auténticos bares lusos que invitan a tomar algo y conversar.
Cabe destacar que la ciudad lusa acoge a varios monumentos reconocidos como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Ejemplo de ello son los Jerónimos o la Torre de Belém, en la zona de Belém. Un espacio dentro de la región en el que sentirás la sensación de grandiosidad de los tiempos del Gran Imperio Portugués.
Los atractivos desconocidos más allá de la capital
Añade en el itinerario una visita a los alrededores de Lisboa. Rincones con un encanto especial, como Amadora, un área rural reconvertida en una zona urbanita que conserva aún sus monumentos más característicos o la localidad de Oeiras, la primera reserva mundial del surf y una de las villas más antiguas del país. Asimismo, en Mafra/Ericeira se encuentra el conocido Convento de Mafra, la obra más destacada del barroco portugués o la Tapada Nacional, un espacio verde con una gran diversidad de flora y fauna que se puede recorrer en bicicleta. Otra opción es Loures, un municipio donde se elabora el conocido y tradicional vino de Bucelas. Y, para completar la lista, visita el Monasterio de Odivelas o el Santuario do Cristo-Rei en la localidad de Almada.
Otro ‘must’ de Lisboa son las ciudades rurales y costeras que se encuentran a pocos quilómetros de la capital. Cascáis, a solo 20 minutos, es una metrópoli con una fuerte tradición náutica, caracterizada por su elegancia y solidificación, ya que, antiguamente era la zona más frecuentada por la realeza europea. Otra opción para hacer turismo rural, situada a solo 30 minutos de Lisboa, son las ciudades de Sesimbra, Palmela y Arrábida; donde se encuentra la reserva natural del estuario del Sado, te permite conocer la historia de la zona visitando el Castillo de San Jorge y disfrutar de sabores costeros en sus emblemáticos restaurantes. También Sintra, una ciudad ubicada a 25 quilómetros de la capital, es una de las localidades más místicas y románticas de Portugal por sus bancos de niebla, sus fincas, palacios, mansiones y rincones que han inspirado a poetas, pintores y escritores.
Gastronomía y tradición
Lisboa, además de una historia y cultura únicas, también tiene un gran legado gastronómico. Prueba su pescado, que tiene un gran protagonismo en la cocina autóctona de la zona, en especial el bacalao y las sardinas. Además, al ser una zona rica en viñedos, puedes degustar una gran variedad de vinos y sangrías locales y no te puedes perder los dulces y postres lusos, sobre todo su receta estrella: el famoso Pastel de Nata espolvoreado de canela.
Una de las ciudades más seguras de Europa
Lisboa se define como un destino seguro y preparado para recibir turistas. Se han aplicado diversas medidas de salud pública para proteger tanto a los visitantes como a la población local y evitar la propagación del virus. En el sector del turismo, se ha lanzado el sello “Clean & Safe”, que permite a los visitantes identificar los negocios que cumplen con los requisitos de seguridad.
Además, se han implantado otras medidas como el distanciamiento social y el uso obligatorio de mascarillas en los transportes y servicios públicos, en tiendas y supermercados, en espacios cerrados o en las zonas de mayor tránsito donde es imposible mantener la distancia de seguridad establecida.
Este año, Turismo de Lisboa apuesta por ser un destino donde los turistas españoles pueden disfrutar de una escapada de fin de semana largo o unos días de vacaciones, y descubrir la simbiosis perfecta entre naturaleza y mar, patrimonio e historia, y una gastronomía inigualable a pocos kilómetros de nuestro país.