La Fórmula E muy conforme con Punta del Este

Un circuito junto a la playa –donde ya se había corrido TC 2000- albergó la tercera fecha de la primera temporada de la Fórmula E, la nueva categoría de motores eléctricos del automovilismo mundial, que fue el evento tuerca más importante que se haya desarrollado en Punta del Este.

Martín Laventure, alcalde de la ciudad, afirmó que tanto los organizadores como los pilotos –muchos ex Fórmula 1- les hicieron llegar informes “muy positivos”, así como el comercio y los proveedores locales de servicios.

Alain Prost, cuatro veces campeón de Fórmula 1 y dueño del equipo en el que corre su hijo, se mostró contento por poder caminar por la calle para ir a la panadería cerca del circuito todas las mañanas, contó Laventure.

Autoridades uruguayas participaron de la inauguración de la pista.

Unos 25 millones de telespectadores se esperaban para el tercer gran premio de la temporada estreno de la categoría eléctrica, que lleva invertidos unos US$ 100 millones en su desarrollo.

Según Laventure es “difícil de medir” el impacto económico en la península, más allá de la exposición internacional y la visita directa de unos 2.000 extranjeros que se alojaron en hoteles –sólo la organización reservó unas 2.700 noches- y residencias de primera línea entre la península y La Barra.

Se vendieron todas las entradas para el circuito, dijo el alcalde de Punta del Este, quien fue uno de los encargados junto a la intendenta Susana Hernández de cortar la cinta de la pista y de entregar premios en el podio.

Además, cientos de apartamentos de la rambla de playa Brava fueron alquilados a grupos de espectadores que pagaron entre US$ 500 y US$ 2.000 por día por ocupar los mejores balcones con vista al circuito frente a la playa.

La organización fue “muy exigente en todo sentido” y la colaboración uruguaya fue estimada como muy satisfactoria, tanto en la infraestructura como en la seguridad.

El alcalde indicó que se intentó “minimizar las molestias” a los residentes y turistas durante las semanas previas de preparación. El montaje requirió el corte de un amplio sector de la rambla y otras calles por varios días.

Más de 2.000 integrantes de la organización pasaron varios días en Punta del Este.

Algo similar está comenzando a suceder en la zona de Puerto Madero, Buenos Aires, donde la cuarta fecha se correrá el 10 de enero.

Laventure indicó que en la ciudad quedan mejoras para el uso público, aunque el vicealcalde de Punta del Este, Julio Pérez dijo a FM Gente que el trabajo para recomponer la zona que se usó para la carrera llevará tiempo, y que para “antes de Navidad” estará habilitado, pero el proceso lleva tiempo.

“Antes del 25 ya tendremos el circuito y la rambla (de Playa) Brava habilitada; se va a trabajar de noche y a toda hora”, dijo en FM Gente, explicando que “se van a hacer algunas chicanas para que no tomen el lugar como circuito de carreras. Dijo que en el lugar “había muchos canteros que se sacaron y se amplió todo el estacionamiento” además que “hay lugares donde las calles habrá que señalizarlas porque se abrieron”.

Si bien la Intendencia de Maldonado y la alcaldía de Punta del Este participaron activamente en la organización, tanto en el lugar como en la transmisión televisiva hubo poca presencia de Uruguay y no se vio su marca Uruguay Natural. “Hubo una participación pero no se tuvo, de repente, una real dimensión de la carrera y para la próxima vez se podrá ofrecer un respaldo mayor; Punta del Este como destino se promocionó, que es la marca con la que los organizadores buscaron identificarse”, indicó Laventure.

En este sentido, indicó, los organizadores se fueron conformes. Alejandro Agar, uno de los socios fundadores de la categoría, dijo que querían estar en Punta del Este porque es la Monte Carlo de Sudamérica.