Marcelo Costa: “Quienes no trabajan el segmento LGBT están perdiendo turistas y dinero”

Aseguró que es un error no trabajar productos pensados para la comunidad LGBT, no solo porque hay leyes que reconocen sus derechos, sino porque se pierde mucho dinero, puesto que se trata de un segmento con alto poder adquisitivo.

¿Cómo se trabaja el segmento LGBT desde el INPROTUR?

En 2012 se implementó el Plan de Marketing en la parte de turismo LGBT dentro del INPROTUR, buscando afianzar a aquellos pasajeros y traer más viajeros a la Argentina. Lo que se hizo fue trabajar en conjunto con la Cámara de Comercio Gay Lésbica (CCGLAR) para poder interactuar y coaccionar. Juntándonos con los actores correctos, como la CCGLAR, los boliches, comerciantes y la parte educativa, se puso en marcha un plan en conjunto para salir adelante. Cuando decidimos hacer promociones en el exterior siempre promocionamos la parte LGBT porque así incrementamos la cantidad de pasajeros, de hecho desde que hacemos estas acciones aumentaron un 10% los turistas y es muchísimo dinero que entra en el PBI del país.

¿Qué impacto tiene el segmento en términos económicos?

El 16% del Producto Bruto Mundial está manejado por gente gay, así que imaginate el peso del segmento. Acá en Argentina somos 40 millones de habitantes, tenemos más de 3 millones de personas que pueden llegar a ser potenciales clientes LGBT, pero no solo los tenemos a ellos sino también a los que recibimos. Además, el hétero en nuestro país viaja una vez por año en forma vacacional y el gay viaja tres veces más, y hasta cinco veces más un 35%.

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¿Cuál es el perfil del turista que visita Argentina?

Buscan una ciudad cosmopolita como Buenos Aires, pero también atractivos naturales. Nosotros siempre recomendamos vender que hay noche gay en Buenos Aires, pero que en Argentina también tenemos glaciares, montañas, selva, esquí, golf, polo. Por eso, es súper importante tener en cuenta que el turismo LGBT es transversal, porque para todos esos productos que manejamos en INPROTUR hay gente gay. 

¿Se sabe puntualmente qué buscan los gays y qué las lesbianas?

Si, hay tendencias bien marcadas. El chico busca más atractivos de noche y se tira más a lo que es la parte de moda, tendencia de ropa, diseño, informática. Y la chica busca más la naturaleza, deporte, vida natural y al aire libre. En destinos, Buenos Aires sigue siendo la ciudad número uno para hombres y mujeres, pero para los gay la segunda ciudad es Mendoza y la tercera Calafate, y para lesbianas la segunda Córdoba y la tercera Mendoza.

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Por las leyes que Argentina ha ido sancionando, de alguna forma le ha marcado el camino a los países vecinos ¿cómo está la región en cuanto a la aceptación?

Después de la Ley de Matrimonio Igualitario, Argentina no tiene un gueto, estamos abiertos y tenemos una tendencia más friendly, así que ocupamos el lugar número uno en aceptación LGBT, seguido por Brasil y México. Se está haciendo un trabajo extenso, ayudamos a abrir la Cámara de Comercio Gay Lésbica de Perú, la de Colombia ya estaba funcionando, estamos colaborando para abrir la de Chile y este jueves tenemos reunión con el gobierno de Uruguay para poder poner en marcha la Cámara uruguaya. Quiere decir que nuestros colegas y países regionales aliados se están dando cuenta que tienen que hacer algo y cambiar porque pierden pasajeros.

¿Y qué pasa en el interior de Argentina que no suele ser tan abierto como Buenos Aires?

La CCGLAR y el INPROTUR ofrecen a todas las provincias y municipios capacitaciones sobre turismo LGBT porque hay que educar para poder atraer más turismo a la Argentina, pero tenemos claro que no vamos a obligar a nadie a que nos reciban. Nos ha pasado que nos dijeran ‘no podemos aceptar que vengan a dar una charla LGBT’ y ahora nos están mandando mails pidiendo por favor que vayamos. Se están dando cuenta de la cantidad  de pasajeros potenciales que están perdiendo, porque es una realidad: los que no nos llaman se pierden más de un 20% de ingresos que puede llegar a dejar la gente gay en esas provincias.