Temporal causó daños en infraestructura turística en Uruguay

Ramblas rotas en balnearios de Canelones, playas afectadas por los residuos de las crecidas de ríos y arroyos, barrios anegados en localidades turísticas y hasta una casa que se derrumbó en Punta del Diablo son algunos de los efectos del temporal de lluvia y viento que en la última semana afectó a la costa uruguaya.

De hecho, las mediciones pluviométricas indican que este es el verano más lluvioso de los últimos 40 años, con precipitaciones que superaron en 24 horas el promedio de un mes y que, en los últimos 15 días marcaron récords en varios puntos del país. Y los pronósticos de lluvia se mantienen para este martes y miércoles.

Rambla de la playa Brava en Atlántida.

“Se han deteriorado los accesos a los balnearios, esto afecta el turismo; se está haciendo relevamientos de afectación en la infraestructura en cada departamento”, dijo en conferencia de prensa el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Gabriel Frugoni, tras el Consejo de Ministros de este martes, en el que los daños del temporal y las lluvias fueron tema central.

En Ciudad de la Costa, Canelones, numerosas calles fueron inundadas y resultaron severamente dañadas al punto que se encuentran intransitables. Un tramo de la rambla de Salinas se fracturó y lo más crítico fue el desplome de un segmento de la rambla de Atlántida, sobre la playa Brava, por donde pasa una cañada.

El gobierno departamental de Canelones anunció un “plan de reconstrucción” que comprende la rehabilitación vial así como el trabajo en cunetas y desagües en zonas donde no hay saneamiento ni sistemas de evacuación pluvial.

En Punta del Diablo se derrumbó una casa junto al mar.

En este sentido, el intendente de Canelones, Marcos Carámbula, dijo que será presentado un proyecto a la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) “para la realización de las intervenciones costeras de descarga de pluviales hacia el mar”.

En Maldonado, el Gabinete de Obras y Servicios puso a trabajar un total de 250 personas en varios equipos, con maquinaria pesada, para “acelerar los trabajos de reparación de calles, caminos y rutas, recoger ramas caídas” y limpiar las miles de toneladas de residuos que llegaron a las playas, incluyendo camalotes que podrían arrastrar víboras y otras alimañas hasta las costos, y hasta un ternero muerto que llegó a la Playa de los Ingleses, en Punta del Este, arrastrado por las aguas. Se estima que los trabajos demandarán varias semanas, indicaron las autoridades.

Ternero arrojado por el mar a la Playa de los Ingleses, Punta del Este, tras inundación. Foto FM Gente

En zonas turísticas como El Tesoro y La Juanita varias casas fueron inundadas.

En Rocha, el balneario de Punta del Diablo fue seriamente afectado. Una parte de la calle que lleva a la playa La Viuda fue arrastrada por las aguas, que dañaron muchas calles del poblado. Incluso, una casa situada sobre la costa cedió y fue parcialmente destruida por la fuerza del agua. Otras viviendas se encuentran en riesgo de derrumbe.

Ramas caídas afectaron tendido eléctrico en La Barra.

En La Paloma la Intendencia debió intervenir en plena tomenta para destapar desagües y drenajes ya que amplias zonas se encontraban anegadas. Las mismas situaciones se registraron en otros balnearios, como Aguas Dulces y Valizas, donde el desborde del arroyo afectó a varias casas.

Los departamentos de Soriano, Flores, Colonia, San José, Canelones, Montevideo, Maldonado, Lavalleja y Rocha fueron los más afectados por las lluvias de febrero, según la Dirección Nacional de Meteorología.

La rambla de Salinas sufrió importantes daños.

El mal tiempo, además, ha hecho que muchas personas decidieran interrumpir sus vacaciones, causando perjuicios adicionales a la industria turística, que acusa una temporada a la baja por las restricciones argentinas al cambio de moneda, la devaluación de enero en ese país y los altos precios que se registran en los balnearios de Uruguay.

Operativo de limpieza en playa de Punta del Este.