Los futuros turistas

¿Cómo serán los futuros turistas, dentro de 10 años?, se preguntó la ministra de Turismo, Liliam Kechichian. "Más exigentes, más informados, buscan experiencias y requieren una oferta más personalizada". Ya lo son. Por eso, subrayó, "la vara de las exigencias de los futuros turistas está muy alta".

El Plan Nacional de Turismo Sostenible 2030 "plantea claramente la importancia de distinguirse en cuanto a la calidad humana, en servicios, en recursos humanos y profesionalización", señaló Kechichian. Fue elaborado con el aporte de todos los actores de la cadena de valor del sector y proyecta el país al que se quiere llegar en el 2030 a nivel turístico.

Presentación del Plan 2030 y el Prospecto 2050 en el Ministerio de Turismo.

El trabajo coordinado entre todos los actores del sector fue destacado por Juan Martínez, presidente de la Cámara Uruguaya de Turismo. "Es importante y trascendente tener un plan a mediano plazo para un sector de actividad fundamental para el país", afirmó.

El caracter participativo, dijo, "es un distintivo importante del turismo a la hora de encarar proyectos".

El Plan 2030 es "una guía, un plan de acción para tomar las decisiones correctas; una hoja de ruta más allá de administraciones que marca la política de Estado para los próximos años".

Los tres ejes centrales del plan son: 1- Planificación, gestión de destinos y manejo de la oferta. 2- Empleo y recursos humanos: capacitación, emprendedurismo. 3-Marketing, comunicación y promoción.

Mirada a 30 años

Sobre el Estudio Prospectivo Turismo 2050 -para el que fueron consultados casi 400 expertos- el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Álvaro García, mencionó que se construyeron escenarios con variables de "qué grado de sofisticación tendrá la demanda turística, y qué grado de personalización debe tener la oferta".

¿Y cuál es el escenario deseado para Uruguay en 2050? El de un "país de anfitriones", dijo García, destacado por su identidad y la puesta en valor de productos locales con calidad, productos naturales y culturales integrados entre sí. A su vez, el turismo se proyecta como una herramienta de desarrollo local valorada por tomadores de decisión y comunidades locales.

Esa mirada a largo plazo -tres décadas- será una referencia de utilidad "para cuando se elaboren políticas públicas y se decidan las asignaciones presupuestales".

La ministra mencionó que el futuro debe tener en cuenta "el impacto brutal de las nuevas tecnologías". Si bien "Uruguay ha estado a la vanguardia en comunicación digital" -afirmó- la comercialización se encuentra "en un momento complejo y de cambio, con más oferta personalizada, más segmentación y la lupa puesta en el consumidor".